NO TE PIERDAS NUESTRA ENTREVISTA EXCLUSIVA CON JOSEPH KOSINSKI Y CON OLIVIA WILDE
Uno de los estrenos más esperados del año regresa tras 30 años de ausencia. Marcando también el regreso de su estrella original Jeff Bridges como Kevin Flynn el genio de las computadoras cuya investigación sirvió de base para crear un imperio, que dicho sea de paso ha sido corrompido. Desde la misteriosa y jamás aclarada desaparición de Kevin. Ahora su hijo Sam (Hedlund) va a recibir una extraña llamada para internarse en un mundo sorprendente y desconocido donde muchísimas sorpresas le esperan, entre ellas una que va a cimbrar su existencia… cuando la realidad virtual se transforme en la única realidad vivible. Un cinta cuenta con un portentoso despliegue de recursos tecnológicos que hará un punto y aparte en la forma en la que se hace cine hasta nuestros días.
Lo realmente impresionante, además de la obvia producción multimillonaria y de que en efecto, se trata del bombazo tecnológico más fulgurante en el área del séptimo arte este año, es que no se puede dejar de ver la pantalla en un viaje a velocidad luz, tratando de abarcar en su totalidad la abrumadora cantidad de estímulos visuales y auditivos que se reciben a cada segundo.
Háganse un favor y véanla en una buena sala con una pantalla inmensa, porque es una obra para contemplarla en tamaños épicos.
Kosinski se tardó más de tres años en darle forma a este despliegue tecnológico y no estamos exagerando cuando decimos que va a ser un referente visual de la segunda década de los 2000’s
La cinta es puro entretenimiento y asombro cuadro tras cuadro, independientemente de lo simple que sea la estructura dramática del guión (sólo es la eterna batalla del bien contra el mal) ahora situada en un mundo imaginario que va más allá de la realidad virtual la cual hoy por hoy es un objeto de uso diario. La potente carga de avance tecnológico la hacen una pieza "obligada" en el estudio de la dinámica visual del cine dosmilero.
La cuadrícula de la red de soporte del video juego se antoja un campo de cultivo tan fértil como para producir enemigos enormemente poderosos y hazañas que perdurarán por milenios, esa es la magnificencia de crear universos alternos, todas las leyendas están aún para ser contadas.
El director y co escritor original Steven Lisberger ahora produce esta versión reloaded que da un salto cuántico sobre las fronteras del mundo virtual y se entrega de la mano de Kosinski en un espectáculo desafiante tecnológicamente hablando.
No se escatimó en nada y el despliegue económico salta a la vista, no solo en forma del 3D original o los mundos virtuales de la cinta sino en la sorprendente recreación de un Bridges virtual tal y como lo habíamos dejado en Tron hace 30 años, y su contraparte "humana" víctima y preso de su propia creación tecnológica, dominado por un tirano virtual cuyas intenciones, claro está, suponen extender su poder al mundo "real"; pero como en toda saga de leyenda, de esta misma semilla existe un heredero de carne y hueso, el hijo de Kevin: Sam. Quien como en un apocalíptico destino, deberá ser abducido a la cuadrícula y al fin será el único que pueda salvar el día en contra del tirano del mundo cibernético.
La atmosfera interior de Tron es fríamente seductora, resplandece en neones y casi da escalofríos por su rudeza básica, perder es morir, desintegrándose en miles de pixelitos se desee o no.
El mundo Troniano funciona como un completo, la música y la moda, los ambientes y las armas son imaginables como una extensa red de pertenencias que tejen su realidad dentro y fuera del cerebro de los espectadores dando un orden del mundo a la experiencia cinematográfica/mundo virtual/juego . No importa cual nivel se decida acceder es un circo de tres pistas donde cada espectador decide hasta donde se integra, porque el cometido del espectáculo es ser intensamente sorprendente.
Tron tiene un único pero… como en muchos espectáculos que son capaces de dejar con la boca abierta, el sustento de la historia, el guión es relativamente simple y no exige grandes respuestas a preguntas demasiado serias, no está diseñada para ser una estructura dramática impresionante ni para demostrar una gama alucinante de matices actorales, al final del día es una herencia del videojuego y en él es sabido que las grandes tramas argumentales nunca son equiparables al arsenal de recursos tecnológicos pero lo cautivante es que al fin de cuentas la debilidad argumental no importa, entrar a la retícula, volar en esas motos lumínicas y lanzar discos letales son un placer en sí mismos.
Dirección: Joseph Kosinski
Reparto: Jeff Bridges, Garrett Hedlund, Olivia Wilde, Bruce Boxleitner, James Frain, Michael Sheen
País: Estados Unidos
Año: 2010
Duración: 2 horas 7 minutos
Género: Acción, Aventura, Ciencia Ficción, Fantasía
Clasificación: Toda la familia
Fecha de estreno en México: 25 de Diciembre
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