Por Julia Elena Melche.
Emma es una adolescente de 15 años, rebelde, problemática e insatisfecha con su entorno familiar, al que siente demasiado autoritario y represivo. Para terminar con esa situación, la chica da rienda suelta a sus pasiones y deseos más ocultos, lo que traerá el horror y la tragedia a su hogar, ya que con su actitud desencadena las incontrolables y oscuras fuerzas del Mal y terminará siendo poseída por el mismo demonio.
Emma (Sophie Vavasseur) sufre una cortadura en la mano con un espejo y luego padece un ataque de epilepsia, por lo que sus padres hacen que la examine un médico. Aunque parece estar bien de salud, le continúan sucediendo cosas extrañas sin ninguna explicación; temblores y fuertes agitaciones del cuerpo, cambios de voz…Es entonces cuando los padres recurren a un exorcista pues las manifestaciones demoníacas de Emma son evidentes.
Seductor y provocador, el tema de la posesión satánica, ha tenido irregulares resultados en la pantalla y continua llenando las salas de cine para los amantes del género; desde Constantine, Réquiem, El exorcismo de Emily Rose, El último exorcismo hasta El rito. Sin embargo, la madre de todas, sigue siendo el filme de culto El exorcista de William Friedkin, cuyas impactantes escenas no han podido superarse.
En el reciente trabajo del español Manuel Carballo se percibe su inclinación por los temas religiosos y los demonios. En su anterior cinta El último de los justos, abordó la creencia de que la salvación humana recae en 36 hombres justos, a los que una secta milenaria religiosa desea aniquilar. Ahora, arma una cinta con los lugares comunes de las posesiones y del exorcismo para confeccionar una lucha más contra el Ángel Caído.
La película avanza con un ritmo efectivo, una acelerada edición, ambientes oscuros y acertados efectos visuales, pero sin grandes sorpresas. Un demonio que disfruta lastimar a quienes más se aman, encuentra en el cuerpo de Emma el medio para hacerle daño a sus seres queridos y provocar un caos infernal. El miedo, el horror y el elemento sobrenatural están armados de manera realista y convincente para provocar una impactante pesadilla, mediante secuencias, en ratos inquietantes.
Para el director, los filmes fantásticos permiten una reflexión sobre la naturaleza humana. En su cinta, “da voz a los miedos e inquietudes provocados por un mundo que se muestra hostil”. Así, Carballo muestra a una Emma que está inmersa en el desasosiego absoluto a causa de las inseguridades, insatisfacciones y los temores propios de la adolescencia. Se busca a sí misma, tiene fuertes dudas existenciales y huye de unos padres sobreprotectores y casi perfectos. Como toda jovencita de su edad, es frágil, vulnerable, sensible y en pleno proceso de construcción, afirma el cineasta, quien incorpora la posesión demoníaca para enlazarla con mitos culturales y humanos clásicos, como el de Fausto: el miedo a la enfermedad, a la locura, y a la oposición de la fe y la razón. Al mismo tiempo retrata el de Edipo y Electra para hablar de los conflictos y enfrentamientos generacionales entre padres e hijos, lo que contribuye al dramatismo de la historia.
Dirección: Manuel Carballo.
Reparto: Sophie Vavasseur, Stephen Billington, Richard Felix, Douglas Bradley y Jo Anne Stockham.
País: España.
Año: 2010.
Género: Terror.
Duración: 98 minutos.
Clasificación: Adolescentes y adultos.
Fecha de estreno en México: 19 de agosto de 2011.
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