lunes, 11 de enero de 2010

OPIUM: DIARIO DE UNA MUJER POSEÍDA (OPIUM: DIARY OF A MADWOMAN). TAL VEZ OBSESIONADA, TAL VEZ LOCA...

UNA MUJER QUE LUCHA ENTRE LA LOCURA Y LA POSESIÓN DIABÓLICA.

Por Jorge Cirerol.

El realizador húngaro Janos Szasz, vuelve a revisar los diarios del neurólogo Geza Csath -como lo hizo en The Whitman Boys, (98)-, y coescribe junto a Andras Szeker una retorcida historia sobre un médico drogadicto y una paciente con una profunda enfermedad mental.

Todo se desarrolla dentro de un sanatorio húngaro para enfermas mentales. Transcurre el año 1913, un tiempo en que los métodos para tratar los trastornos mentales son poco ortodoxos -inmersiones en agua casi hasta la asfixia, descargas eléctricas, baños con agua helada, cirugías oculares para eliminar la memoria sensorial, etc. A este lugar llega el doctor y también escritor Joszef Brenner (Ulrich Thomsen), un hombre adicto a la morfina deseoso de explorar nuevas técnicas psicoanalíticas y que sufre de un bloqueo que le impide escribir.

Confrontado con el cuerpo médico del sanatorio así como por el director de la clínica, el doctor Moravcsik (Zsolt László), quien desaprueba sus extraños métodos de tratamiento, Brenner es seducido por la obsesión a la escritura que manifiesta una joven interna, Gizella (Kristi Stubo), quien piensa que un extraño ser la posee y tiene esa manía de escribir ya sea como purificación emocional o como una fascinación erótica. El neurólogo poco a poco se ve envuelto en una serie de revelaciones sobre sí mismo, que lo harán cuestionar.

Szasz, quien dirigió Woytech y The Whitman Boys, películas nominadas al premio Oscar en la categoría de Mejor Filme Extranjero en 1995 y 1998, de nuevo es cautivado por este autor, una figura terriblemente brillante que además de médico y escritor, fue músico y periodista. Asesinó a su esposa y se suicidó antes de que lo capturaran y cuyas memorias lo catalogan como un ser inusualmente perverso y sorprendentemente franco.

Este filme que formó parte de la muestra fílmica Cinema Europa 2009, organizada por La Cineteca Nacional, que se realizó en nuestro país en el mes de octubre, camina entre el sadismo y el absurdo y por momentos lanza una mirada reflexiva. Se trata de una historia Fáustica. Un viaje al mundo de los condenados, torturados a sí mismos unos a otros, llámese médicos o pacientes, alentados por sus propios demonios. Una pesadilla de la que uno no puede liberarse. Una experiencia más bien emocional en la que la lógica y la razón no son de mucha ayuda.

La voz en off de una mujer que comienza las narraciones pronto es sustituida por la de un segundo narrador, la del doctor Brenner, y restan valor al título. Es una especie de historia de amor pero distorsionada que puede llegar a ser tensa y hasta desconcertante. Incluso podría resultar decepcionante porque no profundiza su historia sobre enfermedad mental y queda como un retrato más del fracaso de la ciencia sobre el dominio de la mente humana.

Dirección: János Száz.
Reparto: Ulrich Thomsen, Kirsti Stubø, Zsolt László, Enikö Börcsök, Gyöngyvér Bognár, Roland Rába.
País: Hungría / Alemania / USA.
Año: 2007.
Género: Drama.
Duración: 109 minutos.
Clasificación: Mayores de 18 años.
Estreno en México: 08 de enero de 2010.

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