La situación parece desesperada y perdida cuando Bree sintiéndose defraudada y abandonada por sus amigas escribe su nota suicida en un cuartucho de hotel… aunque una providencial llamada a la puerta le evita jalar del gatillo. Es Renee, que cree que Bree está ahí con Ben, así que se mete a fuerza al cuarto…. y no le hace falta demasiado para darse cuenta de lo que pudo haber sucedido ahí. Esto la obliga a mudarse con Bree y esconder cualquier artefacto que pudiera ser mortal. Bueno, también se deshace de la cortina de baño… porque era fea.
Una nota se esparce como reguero de pólvora en Fairview donde las malas noticias corren más aprisa que la luz. El detective Chuck Vance muere a causa de un atropellamiento. Desde luego, pasado el shock, las amigas se reúnen y creen que pueden respirar de nuevo… hasta que a alguien se le ocurre que tal vez la providencial muerte de Chuck no sea “tan buena” después de todo… alguien pudo matarlo a propósito. Gaby miente diciendo que Carlos no pudo ser ya que está en su clínica de desintoxicación, pero él no está ahí y eso nos consta.
Gaby va a los alrededores de la estación de policía a ver si se entera de algo y lo único que sabe es que todos sospechan que la muerte de Chuck no fue accidental.
Carlos no puede recordar que sucedió cuando se salió del centro de rehabilitación. Un policía en el funeral de Chuck dice que Carlos entro a la estación de policía balbuceando que le había pegado a alguien con un candelabro. Gaby se hace cargo y lo saca del aprieto. A solas le dice que lo ama, pero que si vuelve a ir a la policía sin su permiso, ella misma se encargará de enterrarlo en el bosque.
Susan no puede entender por qué sigue tan deprimida por lo de Alejandro y se da cuenta de que su teléfono sonó mientras estaban por enterrarlo, eso significa que tiene una familia o alguien que no sabe qué le ha sucedido; así que decide ir a Oklahoma a ver si los parientes de Alejandro están bien
Tom aún esta impactado por el hecho de que Lynette sea cómplice de un crimen y promete sacarla de todo ese lío, va con Bob (solo previniendo que vayan a necesitar un abogado) Claro, todo esto antes de enterarse de que Chuck está muerto. Lynette esta tan agradecida por todo lo que Tom ha hecho que lo invita a pasar una noche de cine en compañía de sus hijos.
En una noche que se antojaba deliciosa, Lynette se molesta con Tom porque ordena pizza de pasta gruesa ¡después de 23 años de matrimonio y de estarle diciendo que a ella le gusta la de pasta delgada!…. Eso hace pensar a Lynette que no le importa más a Tom y cuando lo hablan, ella misma le dice que si quiere puede irse con Jane a París. Tom le dice que puede quedarse a ver primero la película
Bree no quiere confiar en Renee porque no considera que sean lo suficientemente amigas, pero eso no hace que Renee deje de vigilar que todo esté bien con Bree. Renee no quiere revivir el dolor de cuando su madre se suicidó.
Finalmente Bree se percata de que Renee, para bien o para mal, fue quién le salvó la vida… lo que la hace ser la mejor amiga que jamás haya tenido
Bree y Lynette hacen un conteo de las personas que sabían lo de Alejandro para ayudarse a determinar quien pudo haber matado a Chuck. Tal vez… podría ser la persona que escribió la primera carta, a quien representan con una gran interrogación en el conteo… o tal vez hasta sea la persona que acaba de dejar un mensaje en el buzón de Bree con dos palabras: “De nada”
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