CÓMO IMPEDIR UNA BODA (BACHELORETTE)

Por Fabián Quezada León

Regan (Dunst), Gena (Caplan), y Katie (Fisher) han sido amigas de Becky (Rebel Wilson)  bueno, no tan amigas… ellas siempre se burlaron de ella pero Becky aún así las considera sus mejores amigas y las invita de madrinas a su boda. Tal vez sea oportuno  mencionar que las tres llamaban “cara de cerdo” a su inocente amiga. Según las leyes de la vida Becky al tener sobrepeso y ser simple sería la que se casara al final, o la que de plano no se casara, pero… he aquí que Becky se va a casar y las tres no pueden soportar la idea ni de chiste.

Regan toma la batuta para “darle la mejor boda del siglo” a su amiga” Gena y Katie solamente son unas desmesuradas fiesteras que tienen una amplia adicción a cualquier cosa que las “coloque”. Comienza la noche previa a la boda y las tragedias no se dejan esperar como es lógico. Así entre resentimientos y prolongaciones de bullying mucho más allá de la prepa, estas tres mejores enemigas de la novia van a demostrarnos entre otras cosas  lo perdidas que están en la vida y las terribles decisiones que se pueden tomar en una noche de copas.

Las bodas son un tema que predominantemente involucra sentimientos muy confusos en las mujeres, en muchas, pero más aún cuando las situaciones de vida propia son un desastre frente a la “normalidad” la “corrección”  la declaración de “vivieron felices por siempre” de otra mujer que se casa.

Tres amigas que fundamentalmente han odiado a una sin una causa de fuerza mayor además, deben ser “co-participes “de esa felicidad que están a años luz de sentir.  Al ir presentando la doble cara de estas “damas de honor”  no solo se denota ese odio ancestral por la “gorda” sino el inmediato “ella pudo y yo aun no”  y los cerebritos malévolos de estas “amigas” comienzan a trabajar para el desastre pero la broma se les va de las manos y no es lo único que se va, las sustancias prohibidas se desparraman planteando seriamente si el final de la fiesta no será todos recluidos en un centro de rehab.

Estas historias de “amor/odio” entre mejores amigas han sido ya tema de varios tratamientos en especial cuando el subtema “boda” aparece flotando en el ambiente. Y referencialmente tenemos muy cerca “Damas en Guerra” donde la competencia y mezcla de sentimientos en torno a la boda se explayan de una manera diferente. Lo que subyace es el hecho de que al parecer, no hay amiga sincera que realmente se alegre por la boda de la otra. Y para muestra tenemos las “bromitas” que las amigas de Becky le organizan.

El punto aquí es que Bachelorette no es una comedia ni una versión ruda de que pasó ayer protagonizada por mujeres, es un drama demasiado ácido con momentos de ayuda cómica pero que fundamentalmente muestra a unas treintañeras siendo descarnadamente rudas, egoístas, vengativas y adictas podría pensarse que es una versión desfigurada de esta generación treintañera pero, lo espeluznante es que es perfectamente creíble. Estos adultos jóvenes que no han logrado ni la adultez ni la maduración y que se comportan como adolescentes postdatados tratando inútilmente de encontrarle la gracia. Eso es un asunto grave y poco confortable. Por alguna razón la cinta pareciera estar dirigida para aparentar ser una comedia, cuando en realidad es un crudo drama. Hay suficiente soledad y desamor, relaciones equivocadas y sustancias ilegales como para alzar la ceja y la dirección tampoco toma la decisión de plantear una postura como si buscara que si alguien se ríe piense que es comedia y si alguien se conmueve crea que es un drama. Lo que si es cierto es que a veces la realidad no es tan divertida aunque a otro le pasen cosas terribles.

Dunst ejecuta una terriblemente fría y ejecutiva Regan mientras que Fisher lleva a su Katie por la vía de la boba drogada que sabe que la inteligencia no fue lo suyo en la vida mientras que Caplan da vida a una especie de desempleada con demasiados ligues amorosos y una rampante afición por la cocaína que sin embargo tiene un cruel pasado con su novio quien casualmente esta también invitado a la boda. El script original de esto fue una reconocida obra Off Broadway que sin embargo al entrar en contacto con el cine perdió la brújula y aunque conserva sus diálogos agudos y su humor ácido tal vez fue demasiado lejos en ello y por eso es que de repente la cinta tambalea. Y la duda de por qué alguien querría en su boda a semejantes arpías queda demasiado expuesta.

Sin embargo en un momento, esta extraña “hermandad femenina” de la que también hemos tenido ya varios ejemplos como aquella famosísima frase de “Entre Mujeres podemos destrozarnos pero nunca nos haremos daño” y tal vez por no dejar a los personajes del asco o por acabar en un final menos ácido, se plantea que aún las mujeres menos “caritativas” pueden tener cinco segundos de redención (aunque no dejen las drogas) pero sí valdría preguntarse si efectivamente este era el camino que deberían seguir estas tres amigas.

Director: Leslye Headland

Reparto: Kirsten Dunst, Isla Fisher, Lizzy Caplan, James Marsden, Adam Scott.

País: Estados Unidos

Año: 2012

Género: Dramedy

Duración: 1 hr. 33 min

Clasificación: Mayores de 15 Uso de drogas y alcohol, contenido sexual

Fecha de estreno en México: 12 de Julio