En el último capítulo vimos como Teddy al llegar a casa encuentra a Henry vomitando sangre… Pues obvio, debe ir corriendo al hospital a internarse. Teddy dejarála vida de su esposo en manos de sus colegas pues justo en el momento en él que el entra a quirófano (Ya que tiene un nuevo tumor que le afecta pulmones y tráquea) Teddy debe atender un grave caso de una mujer que tiene una complicación cardiaca.
Así que el equipo médico decide atacar el tumor con cirugía laser... Cristina debe hacer la operación pero para no presionarla el equipo decide ocultar la cara de Henry mientras se realiza la operación. La suerte de Henry está en manos de Cristina pero existirán enormes complicaciones. Owen debe tomar una grave decisión y Richard se culpará por algo de lo cual nunca será perdonado.
Por su parte Meredith y Derek reciben noticias sobre Zola. Callie y Jackson deben de sacar la cara para responder por un paciente que tuvo una mala cirugía y Meredith y Alex se ven envueltos en una peligrosa y mortal situación cuando deben salir corriendo a atender a una recién nacida en un hospital lejano a SGH.
Es una noche oscura y lluviosa y el camino de regreso a SGH está lleno de curvas y como en los días malos sucede… la ambulancia se descompone en la mitad de ninguna parte. Antes de irse a buscar ayuda el conductor les previene a Meredith y Alex que permanecer en la unidad es muy peligroso… están llenos de tanques de oxígeno… si alguien los chocara podrían estallar… Meredith y Alex deben decidir si salirse de la ambulancia y abandonar a la bebé cuando… bueno, para concluir su mal día…algo los choca por detrás…
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