Por Julia Elena Melche.
“Hay un solo tema que conozco más que ninguno otro, uno que
me inspira incondicionalmente y que amo por encima de todo, ese sin duda alguna
es mi madre. Es ella por la que quiero escuchar gritar fuerte cuando no dijimos
nada. Es ella por la que quiero estar en lo correcto cuando estamos equivocados.
En los días de J’ai tué ma mère (Yo maté a mi madre), sentí que
quería castigar a mi madre. Sólo cinco años han pasado desde entonces y, a través
de Mommy,
ahora estoy buscando su venganza”, comenta el realizador canadiense Xavier
Dolan, quien a los 16 años escribió el guión de su primera cinta, Yo
maté a mi madre, basándose en sus propias vivencias y mezclando las
mismas con la ficción y por la que ganó tres premios en el Festival de Cannes
2009.
Mommy surge a manera de consecuencia de Yo
maté a mi madre, donde el protagonista, interpretado por el propio
cineasta, vive una homosexualidad encubierta a medias y una conflictiva
relación con su madre, a la que odia por su comportamiento vulgar y su mal
gusto para vestir. Todo en ella lo irrita, así que decide comentar en la
escuela que su madre ha muerto.
Ahora, hace a un lado los dilemas sobre la identidad sexual
y entrega otra intensa historia materno-filial, colocando en el centro a su
actriz fetiche, la brillante Anne Dorval, como una guapa madre viuda cuarentona
que debe hacerse cargo de su hijo Steve de 15 años (Antoine Olivier Pilon,
espléndido), un jovencito hiperactivo,
impulsivo, violento, desordenado y llorón, diagnosticado con el Trastorno por
Déficit de Atención e Hiperactividad, cuando este regresa a casa tras ser
expulsado de un centro de cuidado para menores.
Con una gran dificultad para controlar su enfermedad, Steve
le provoca serios problemas a su madre, llevando la relación a situaciones
límite. La reconfortante llegada a sus
vidas de Kyla (Suzanne Clément, excelente), una vecina reprimida y con
problemas de tartamudez, ayudará para que madre e hijo encuentren el equilibrio
y la racionalidad que necesitan.
Considerado el nuevo enfant
terrible del cine canadiense, Xavier Dolan no juzga a sus personajes. Les
otorga intensidades emocionales físicas y psicológicas para mostrar la
complejidad de una madre para educar y criar un hijo hiperactivo sin el apoyo
del padre, sobre todo cuando se trata de una madre que se aparta de los moldes
tradicionales y en su lugar es arrebatada, excéntrica e impulsiva.
Diane es muy moderna, grosera y estridente y además tiene
que lidiar con su problema de desempleo.
Tiene que ser rigurosa para controlar
a su hijo, pero si alguien se atreve a
tocarlo por su conducta impropia, no dudará en defenderlo. Steve es un
adolescente en erupción. Por su padecimiento desborda energía y cuando se le señalan
los límites de su comportamiento excesivo, se siente aprisionado y es capaz de agredir
a Diane. No obstante, es el hijo cariñoso que ama a su madre por encima de todo,
capaz de golpear a quien la insulte.
A sus 25 años, el cineasta goza de reconocimiento mundial y
ha recibido más de 36 premios por sus cinco obras. A Yo maté a mi madre (09), le
siguió Los amores imaginarios (10), donde un joven y su amiga se
enamoran del mismo hombre. Luego filmó Laurence Anyways (2012), sobre el amor
imposible entre una chica y una mujer transgénero. En Tom en el granero (2013),
aborda de nuevo el tema de la homosexualidad, mediante la atracción fatal de un ejecutivo hacia el hermano de su novio
fallecido.
En Mommy, ganadora del Premio del Jurado en el Festival
de Cannes 2014, ubica la historia en una Canadá distópica que lanza una nueva
ley que permite a los padres dejar a sus hijos con conductas problemáticas, al
cuidado de un hospital del estado. Dolan se aparta del formato habitual
panorámico horizontal, para utilizar el vertical, que parece estrechar aún más el ambiente claustrofóbico y
asfixiante en el que se mueven los personajes, para que contenido y forma vayan
de la mano. Una cámara inquieta captura encuadres de gran belleza, a ritmo de
una magnífica banda sonora, pieza fundamental
en los filmes del realizador, ahora con las notas de grandes como el grupo de rock británico Oasis
con su inolvidable “Wonderwall”, además de canciones de la cantante londinense
Dido y de la compositora e intérprete estadunidense Lana Del Rey.
Una película brillante, irreverente, dolorosa y divertida al
mismo tiempo.
Dirección, Guión y Edición: Xavier Dolan.
Reparto: Anne Dorval (Diane Die), Antoine Olivier Pilon
(Steve), Suzanne Clément (Kyla), Patrick Huard (Paul), Alexandre Goyette
(Patrick), Michèle Lituac (directora), Viviane Pacal (Marthe) y Natalie
Hamel-Roy (Natacha).
País: Canadá.
Año: 2014.
Duración: 140 minutos.
Género: Comedia dramática.
EL DIRECTOR.
Xavier Dolan nació en Montreal, Quebec, Canadá en 1989. Su
carrera en el cine inició desde temprana edad participando como actor en
películas, series de televisión y comerciales. En 2009 se robó la atención
internacional con su primer largometraje, J’ai tué ma mère, que presentó en la
Quincena de los Realizadores del 62° Festival de Cine de Cannes. La historia,
que escribió cuando tenía diecisiete años, tiene tintes autobiográficos.
Sus
dos siguientes filmes también fueron ovacionados por la crítica y premiados en
diversos festivales, Los amores imaginarios y Laurence
Anyways. Desde el año 2000 ha trabajado como actor de doblaje en la traducción
de producciones internacionales al francés. Su anterior largometraje, Tom
en el granero, formó parte de la 56 Muestra Internacional de la
Cineteca, se consagró con el premio FIPRESC y estuvo nominado al León de Oro.
MOMMY SE EXHIBE EN CINETECA NACIONAL DEL MIÉRCOLES 19
AL LUNES 24 DE NOVIEMBRE DE 2014. EN CINÉPOLIS DEL MIÉRCOLES 26 AL DOMINGO 30
DE NOVIEMBRE.
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HORARIOS Y SALAS, CONSULTAR:
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