Por Julia Elena Melche.
En su tercer largometraje, el realizador brasileño
Marcelo Gómes, vuelve a los temas de la soledad y de los vacíos emocionales,
que abordó en su espléndido filme Viajo porque preciso, vuelvo porque te amo
(09), donde un geólogo de 35 años es enviado al nordeste de Brasil para valorar
la construcción de un canal. Contagiado por el vacío de su entorno, empieza a
tener sensaciones de abandono y aislamiento.
Ahora, en Érase una vez yo, Verónica, la joven
del título que acaba de terminar su carrera de medicina en la ciudad brasileña
de Recife, e interpretada por una espléndida Hermila Guedes, atraviesa por una
crisis existencial. A manera de
confesión, platica a una grabadora sus incertidumbres e insatisfacciones afectivas
y profesionales; desde su trabajo demandante
en una clínica psiquiátrica, sus necesidades, sueños y lazos afectivos, hasta su convivencia con
su anciano padre, Zé Maria (W. J. Solha), quien presiente su próxima muerte.
A pesar de que Verónica parece tener el control de su vida, se muestra
indecisa pues no ama lo suficiente a su novio Gustavo (João Miguel) como para
formalizar su relación. Se pregunta sobre su verdadero deseo de ser médico, de
su necesidad de casarse o de tener hijos y canaliza sus sentimientos a través
del sexo. Ella anhela una vida llena de erotismo y de libertad, aunque al mismo
tiempo se siente presionada por su padre, quien le aconseja encuentre un
compañero con quien compartir su vida.
El realizador combina tomas casi documentales de Recife, su
ciudad natal, con primeros planos intimistas, creando una gama de situaciones
que contrastan; la alegría y el colorido de los carnavales y los viajes a la
playa, cargados de sol y de erotismo, chocan con los grises y deprimentes
personajes que acuden al hospital y que plantean sus problemas a Verónica.
En la cinta, la música cobra un papel esencial. "Brasil
es un país muy musical, y yo quería una música dramatúrgica, no que pasase sin
más. Así, el padre que es mayor y nostálgico escucha polcas y frevos antiguos,
mientras Verónica que tiene esa crisis existencial, escucha a Karina Buhr,
cuyas canciones hablan del vacío, de qué hacer con la vida", explicó
Gómez.
Érase
una vez yo, Verónica explora en la búsqueda femenina por conseguir la madurez.
Inmersa en las presiones de una sociedad capitalista moderna, que cada vez son
mayores, la protagonista deberá a aprender a entenderse y a aceptar las mejores
y las peores cosas de su vida, ya sea a través de aventuras, de desventuras, de
sueños, de canciones, de pérdidas, y de encuentros y desencuentros amorosos.
Con un final abierto, el filme recibió el Premio a la Mejor Película, Mejor Actor
de Reparto (W. J. Solha), Mejor Guión, Mejor Fotografía y Mejor Banda Sonora en
el Festival de Cine Brasileño de Brasilia, 2012. También mereció el Premio
Horizontes, Mención Especial en el Festival Internacional de Cine de
Donostia-San Sebastián, España. Este año, Hermila Guedes recibió el Premio como
Mejor Actriz de la Asociación de
Críticos de Arte de Sao Paulo. Brasil
Dirección y guión: Marcelo Gomes.
Reparto: Hermila Guedes (Verónica), W. J. Solha (Zé
Maria), João Miguel (Gustavo), Renata Roberta (María) e Inaê Veríssimo(Ciça).
País: Brasil-Francia.
Año: 2012.
Género: Drama.
Duración: 91 minutos.
PARA INFORMACIÓN DE HORARIOS, CONSULTAR: www.cinetecanacional.net
No hay comentarios:
Publicar un comentario