sábado, 30 de junio de 2018

EL LEGADO DEL DIABLO (HEREDITARY)



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Por: David Dominguez Martínez

Cuando Ellen, la matriarca de la familia Graham, muere, su familia comienza a descubrir secretos extraños y cada vez más aterradores sobre sus antepasados. Cuanto más descubren, más tendrán que enfrentarse al siniestro destino que parecen haber heredado. 


El debutante Ari Aster nos trae una de las propuestas fílmicas más interesantes del año: Hereditary.  



Aster se rodea de un reparto de altura encabezado por Toni Collette (“Pequeña Miss Sunshine”, “Un Niño Grande”, “El Sexto Sentido”) y acompañada por los destacables intérpretes Gabriel Byrne (“Muerte entre las flores“, “Sospechosos habituales“), Alex Wolff (“Día de patriotas“, “Ni un pelo de listo“), Ann Dowd (“The Leftovers“, “El cuento de la criada“, “Compliance“) y la prometedora Milly Shaphiro. Hereditary propone un angustioso viaje a los rincones ocultos de la herencia que nos dejan los que nos preceden. 

Artefactos sospechosos                                            

De vez en cuando podemos asistir a la introducción de ciertos artefactos que cambian la configuración de la realidad. La película de Ari Aster podría ser uno de estos sospechosos artefactos. 

Sembrando una discordia entre cierta casposa crítica cinematográfica y aquellos cinéfagos consumidores de las mal llamadas películas de género. La película se sitúa en medio de un debate que hace tiempo debería haberse acabado: el de la validez del cine de terror. 

En primer lugar El terror se sustenta en la propia validez de éste y su capacidad catártica ¿Podemos negar qué el terror es una emoción configurantes de nuestra personalidad? Por otro lado, desde algunos sectores de la crítica especializada se ha intentando deshinchar este hype creado por la canónica: quesireferenciasporaquíquesiestosehahechoyaquenoesparatanto…  es decir una defensa del género que equivocadamente ataca a la notable cinta.

 

Cuestión de género

Cuesta hablar de todas las partes que componen el rompecabezas de Hereditary. Durante las dos horas de metraje el director juega con el género y la trama: ¿es un drama, una película de casas encantadas, una película sobre la locura, qué es? Esto hace que se la película se convierta en una herramienta de doble filo. 

Pese a que desde mi óptica personal la película fluya adecuadamente y apenas note los tumbos, esta cualidad puede sacar a algún que otro espectador de la película. Hereditary derrocha una energía desbordante, Aster quiere contar muchas cosas en el metraje no siempre con un buen resultado.

Lazos que atan

El propio título del film nos da una gran pista de la temática tratada. Y es que la cuestión de la herencia es el eje principal de la trama. Tenemos la óptica de la herencia como una maldición inexorable, casi biológica. Una temática heredada de la tradición gótica que se actualiza ágilmente. Parece que la demencia de la anciana fallecida es heredada por el personaje de Annie, una herencia que puede dañar a su descendencia.
Entre la llamada trilogía de “La Continuidad de la Sangre” del actor brasileño José Mojica Marins y la versión ficcionada de “El Desencanto” se mueve HereditaryComo en una novela de Zola, nos preguntamos si Annie será capaz de escapar de su herencia.

 

Magia en miniatura

Uno de los grandes aciertos del artefacto es la construcción de un increíble mundo personal. Annie se dedica a hacer esculturas en miniatura de escenas cotidianas. 

Miniaturas que replican la casa de la película y escenas que complementan el pasado de la familia. Jugando así con la idea de que nuestros personajes son solo los juguetes de una casa de muñecas. 

Los extraños ídolos creados por Charlie nos transporta a una realidad oscura vertiente de Svankmajer. El artífice de este diseño artístico se debe a Steve Newburn que trabajó también en “Team América” y en la serie de “12 Monos”.

En último lugar hay que destacar la gran elección de la casa. Tanto su localización en medio de la nada como su diseño. Un diseño que funciona como laberinto y con el que Aster juega continuamente durante la película.

 

Rituales cotidianos

La magia está presente en Hereditary. Si analizamos la película nos damos cuenta que la película esta llena de rituales. Rituales que configuran y sustentan una realidad. Rituales que deben ser destruidos a través de la magia. La magia entendida al modo de Austin Ospare como una voluntad de cambio. Los protagonistas son incapaces de salir de una ritualística automática salvo en los desmesurados momentos dramáticos.

Un drama hiperbolizado y sarcástico representado por una cabeza desmembrada. Una cabeza decapitada como la de San Juan Bautista. Una decapitación precedida del ritual: voluntad, poste eléctrico, coche, envenenamiento, la droga, la tablet, el cine mudo y la noche. Rituales que intentan cambiar otros rituales, magia y tecnología. Este artefacto muestra más de lo que parece. 

 

Conclusión

Cómo hemos mencionado al principio de la reseña, es inabarcable tratar la totalidad de Hereditary. Temas como la interpretación de los actores, el tratamiento del drama y el terror… van a quedar relegados a cualquiera de las miles de reseñas escritas.  Hemos preferido hablar de otra visión o interpretación de la película. Una visión que se podría resumir en que Hereditary nos ha flipao.

Director: Ari Aster
Reparto:
Toni Collette (
Annie)
Gabriel Byrne (
Steve)
Alex Wolff (
Peter)
Milly Shapiro (
Charlie)
Ann Dowd (
Joan)
País: Estados Unidos
Año: 2018
Género: Terror
Duración: 126 min.
Clasificación: B15
Guion: Ari Aster
Fotografía: Pawel Pogorzelski
Música: Colin Stetson
 


jueves, 28 de junio de 2018

SICARIO 2: DÍA DEL SOLDADO (SICARIO: DAY OF THE SOLDADO)




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Por: Fabián Quezada León



En la Guerra del narco no existen reglas. Cuando los carteles comienzan a traficar con terrorismo con la frontera entre México y Estados Unidos el Agente Federal  Matt Graver (Brolin) llama al misterioso Alejandro (Del Toro), cuya familia fuera asesinada   por el jefe de un cartel, para de acuerdo a un plan urdido en Estados Unidos, crear una guerra entre los carteles. El objetivo, secuestrar a la hija del capo dando la apariencia de que la muchacha fue secuestrada por un cartel rival. Eso debería bastar para que ambos carteles se destruyeran mutuamente. Solo que nadie pensó que las cosas se complicarían y toda la operación debe ser abortada dejando a Alejandro y a Matt en medio de una guerra salvaje. 





Nos encontramos con la continuación de la parte uno  "Sicario” donde apenas comenzamos a conocer la historia de Alejandro y Matt y ahora El día del soldado nos lleva un poco más allá.
Del Toro y Brolin repiten partes y nos conducen a una triste y desoladora realidad que se ha hecho el pan nuestro de cada día en México. 

Los terribles, sangrientos y cada vez más brutales resultados de la intensa guerra entre cárteles que se da “en secreto, pero ante los ojos de todos” a lo largo y ancho del territorio.
Y lo más alarmante es que las ramas del poder de los carteles han atravesado no solo territorios, sino sistemas de justicia y política. 

Pareciera que la trama entera de "Día del soldado" surgió directamente de la calenturienta mente de Sheridan, pero (tan duro como eso pueda parecer) La realidad ha superado millones de veces a la ficción en este país.

El planteamiento en líneas generales deja al descubierto la idea (falsa?) de que el territorio mexicano es continuamente violado por intervenciones de diversas agencias gubernamentales norteamericanas en su búsqueda /lucha contra el narco. 


Y colateralmente a eso,  se muestra el terrible e inhumano problema de la migración hacia Estados Unidos y el cómo cualquiera de los retos en el viaje  hacia el sueño americano pueden transformarse en la más angustiosa de las  pesadillas.


El mundo del narco está lejos del glamour en que lo han convertido las “narconovelas y las narcoseries” es un mundo de una crueldad superlativa y una sola regla, nada que entre en él queda a salvo del peligro de muerte y violencia extrema.

La historia une los cabos de los personajes de Matt y Alejandro y el plan de una frágil e inocente desestabilización de los carteles provocando una guerra entre ellos, como si eso fuera nuevo. 

Es evidente que a base de muertes los carteles han aprendido a identificar a la fecha de quien dónde y cómo son los ataques de las bandas enemigas, así que la estrategia de Matt y todas las agencias gubernamentales norteamericanas estaban tratando de esconder un elefante tras de una rama de pino. Más aún cuando un elemento vital es descubierto, se estaba buscando en otras tierras lo que había crecido en el patio trasero de la propia casa. Los terroristas no salieron de donde el gobierno norteamericano creía sino del propio suelo Estadounidense.

Matt Convence a Alejandro de participar en un plan que se sostiene con alfileres, pero Alejandro no lo aceptaría sin su propia agenda, vengar la muerte de su familia.

De ahí en adelante la tensión se da más que por las ilusiones de la historia por la honda sapiencia de que eso va a ser descubierto de un momento a otro. En eso la historia funciona eficientemente.

El director Sollima llega a “Sicario Día del soldado” después de dirigir tramas de acción y crimen en series italianas (La Suadra, Romanzo Crimnale y  Gomorrah)

El tono dark y de bajo mundo en el que Wolski fotografía la historia es otro ingrediente básico, aquí no hay glam, hay sangre violencia y corrupción a cada paso alentando las ansias terribles de un jovencito para convertirse en sicario.


Brolin y Del Toro se colocan como imanes de taquilla en el género de las secuelas. Este año hemos visto a Brolin en tres super producciones Avengers, Dead Pool y Sicario y Del Toro logra acceder al ranking gracias a las argucias del guión de Día del Soldado (por más fantásticas que resulten al final)


El descubrimiento es la figura de Keener, con una ética más fría que el hidrógeno líquido, ni Matt ni Alejandro poseen la gélida sangre de esta jefa de operaciones y que es desperdiciada como personaje. Y la sorpresa es la aparición de Modine como secretario de defensa. 


Esta secuela no cuenta con Villeneuve, ni con Blunt,  eso ciertamente aumenta las expectativas de cómo resolver el problema, y aunque es definitivo que el producto final no es superior a su predecesor, también es cierto que no están enfocadas ni buscan las mismas cosas, “Día del soldado” comienza con raíces en la realidad y termina en sendas divergentes que pisan el terreno de la ciencia ficción, por así llamarlo de alguna manera. 


Lo que sí habría que señalar al trabajo global de la cinta es que si acierta en unas cosas no logra estructurar todo por completo. A medida que la acción transcurre parecen irse derritiendo los conceptos y fraguando en otra cosa diferente al arranque.

Aunque la acción continua, las manifestaciones de violencia se pasan de lo real a lo fantasioso y la credibilidad de lo expuesto se va a los suelos. Las resoluciones parecen más dignas de alguna saga que injertara géneros  de acción de super héroes con narco series.  Mientras que las subtramas pasan a un plano tan lejano que no se reconocen ni encuentran un final. 

El personaje de Isabela (Moner) la hija del jefe del narco que es secuestrada que podría haber crecido mucho más es solo un “disparador” con demasiadas preguntas sin resolver. El plot de la relación entre ella y su “renuente” secuestrador/rescatador merecía mucho más atención por el dilema moral que encierra, además de todo el fermento de la triste y real situación de crimen, corrupción y abusos que el narcotráfico ha establecido, no solo y simplemente en México, sino en Estados Unidos. 


Formando una arena en la cual  el contagio de uno a otro fluye de una manera tan compleja que es muy difícil desenmarañar cada uno de los hilos del entramado real en cada una de sus fases y cómo la adhesión a estas redes se forma en cada uno de los puntos; desde la producción, distribución, comercialización, consumo y cada una de las posiciones que maneja “alguien” desde los grandes capos, hasta los sicarios; filtrándose en toda clase de actividades aparentemente lícitas… o descaradamente ilícitas. Lo único cierto es que nadie inmiscuido en este escenario está libre de toda culpa.    

Director: Stefano Sollima.
Reparto: Benicio Del Toro, Josh Brolin, Isabela Moner, Jeffrey Donovan, Manuel Garcia-Rulfo, Matthew Modine, Shea Whigham, Elijah Rodriguez, Catherine Keener.
País: Estados Unidos
Año: 2018
Género: Acción, Thriller, policiaca.
Duración: 122 min
Clasificación: Mayores de18
Guión: Taylor Sheridan
Cinematografía: Dariusz Wolski.
Fecha de estreno: 28 de Junio 2018