martes, 26 de enero de 2010

SHANGAI EN EL CINE


Por Julia Elena Melche.

Con una inmejorable selección de once filmes, se exhibe una retrospectiva de cuarenta años en la filmografía china en la Cineteca Nacional.

Se trata del ciclo “Shangai en el Cine”, que se lleva a cabo del 21 al 31 de enero, con cintas realizadas entre 1922 y 1962, casi ninguna exhibida en México y que proceden de la Filmoteca de la República Popular China, ubicada en Beijing.

Uno de los motivos de la muestra es ofrecer al espectador una oportunidad única de conocer algunos de los exponentes más destacaos de esta cinematografía y a su vez, que pueda tener un acercamiento con el puerto de Shangai, la mayor ciudad de China y una de las más pobladas del mundo, que se convirtió en el principal centro industrial y comercial de la nación oriental en el siglo XIX por su situación privilegiada y estratégica que facilitaba el comercio con Occidente.

En Encrucijada de 1937, el desaparecido Shen Xiling cuenta la historia de cuatro estudiantes desempleados recién egresados de la universidad en Shanghai.

Dirigida por Sang Hu y basada en una novela de Eileen Chang, Larga vida a la señora, de 1947, es una divertía comedia acerca de la sociedad de Shangai, preocupada por guardar las apariencias en un entorno que se ha occidentalizado.

Cuervos y gorriones es un clásico de la cinematografía china, realizado en 1949 por el cineasta Zheng Jun Li, quien fue víctima de la Revolución Cultural y murió en prisión en 1969. El filme es una metáfora de la división que sufría Shangai en 1948, durante el ocaso del régimen nacionalista.

La basquetbolista No. 5 es la primera cinta de temática deportiva filmada en colores, luego de la conformación de la República Popular China. También significó el debut del realizador Xie Jin, quien continúa activo y narra la truncada carrera de un basquetbolista que es contratado como entrenador de un equipo escolar femenil.

El gran Li, el pequeño Li y el viejo Li, es realizada en 1962 por Xie Jin, conocido por películas sobre la Revolución Cultural, mismas que fueron acusadas de dañar la imagen del Partido Comunista Chino. En este filme dota a los personajes de una chispeante comicidad a través de la cámara lenta, la animación y la imagen congelada.

Con La peluquera de 1969, el cineasta Ding Ran entrega una entretenida comedia de situaciones sobre una ama de casa que desobedece a su marido para trabajar como peluquera. La trama contiene un discurso sobre la evolución de la sociedad china bajo el socialismo, cuando presenta un discurso sobre la evolución de la sociedad china bajo el socialismo, donde todos los ciudadanos debían serle de utilidad a la República. presenta un discurso sobre la evolución de la sociedad china bajo el socialismo, donde todos los ciudadanos debían serle de utilidad a la República. todos los ciudadanos debían serle de utilidad a la República.

La diosa (1934), ópera prima del desaparecido Wu Yong Gang, relata la vida de una prostituta en Shangai , quien es también una madre amorosa que busca la superación de su hijo. La protagonista es interpretada por Ruan Ling Yu, una de las más reconocidas actrices del cine silente

Ángel de la calle de 1937, es un clásico del cine chino que retrata la vida de los pobres en Shangai. Su realizador Yuan Mu Jih,narra a través del humor la existencia de dos hermanas que llegan a Shangai, donde son vendidas y explotadas.

Con Shangai viejo y nuevo (1936), el director Chen Bu Gao lleva a cabo un filme realista de crítica social, donde muestra los contrastes de Shangai.

Juguetes de 1933, filme que denuncia los efectos del ataque de los japoneses a Shangai mediante la historia de una joven artesana de juguetes de bambú y barro que encuentran una terrible competencia con los extranjeros que resultan más baratos.

Cheng, el vendedor de fruta, de 1922, es el filme más antiguo en existencia. Su director Zhang Shi Chuan muestra la vida en Shangai a finales del siglo XIX mediante sus pequeños negocios, sus salas de té y la pobreza en las calles. Cuenta la historia de un vendedor de fruta que se enamora de la hija de un médico.

Finalmente Cien años de luz e imágenes es un magnífico documental realizado por Wang Yiyan en el 2006, con el motivo de celebrar el centenario del cine chino, donde se hace un recuento de la historia de China, desde la llegada del Cinematógrafo Lumière hasta la actualidad.

Para mayor información de la programación consultar la página: www.cinetecanacional.net

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