La Compañía nacional de Danza inicia su temporada 2010 y que mejor forma de hacerlo que con la temporada número 34 del ballet clásico El Lago de los Cisnes, el cual se ha convertido en toda una tradición en nuestro país.
A partir del 27 de febrero, y con la participación de más de 120 bailarines en escena, la Isleta del Lago Menor del Viejo Bosque de Chapultepec, volverá a ser el escenario natural que ha llevado al ballet a convertirse en una de las producciones artísticas de México con fama y prestigio en todo el mundo.
Esta será una temporada emotiva para la compañía dancística, ya que esta puesta marca el retiro de los escenarios de sus primeros bailarines Sandra Bárcenas y Raúl Fernández, para quienes se cerrará el telón a finales de este 2010. Además el ballet contará con nuevo vestuario para el segundo acto.
El lago de los cisnes es uno de los ballets más conocidos y populares del mundo por su concepción, coreografía y música, de la autoría de Piotr I. Chaikovsky. Originalmente se estrenó en el Teatro Bolshoi de Moscú, en 1877, y paradójicamente no fue muy aceptado. Sin embargo, en 1895, con la nueva coreografía de Lev Ivanov y Marius Petipa, logró un gran éxito en el Teatro Marinsky de San Petersburgo.
En México, desde 1977 forma parte del repertorio de la Compañía Nacional de Danza, presentándose ante miles de espectadores a lo largo de 900 representaciones.
Las funciones se llevarán a cabo A partir del 27 de febrero y hasta el 28 de marzo, de miércoles a domingos a las 20:00 horas. Para mayores informes se puede consultar la página web del Instituto nacional de Bellas Artes:
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