Demi Lovato, Demi
Por:
Nacho Azcárate
Para
quien no se había enterado, Demetria Devonne Lovato, a sus 20 años ya es una
mujer. No más Barney y sus Amigos. No más Camp Rock. Esos días desabridos se
quedaron atrás. Un día eres Princesa de Disney y al siguiente un paso en falso:
tu vida ya se trata de rehab, retomar
tu camino y de paso reconocimiento internacional.
Demi
Lovato, ahora jueza de X-Factor, es quizás la que más se ha separado de sus
compañeras de generación en la escuela de Disney (Miley Cyrus y Selena Gómez).
Igual es por su bajo desempeño en las materias de “Cuidado de la Salud” y “Civismo”. ¿Pero será cierto que se graduó
con honores de la materia de “Música”?
Uno
pensaría que al llamarse como ella, el disco Demi sería su entrega más personal hasta el momento. Me refiero a
letras confesionales, temas sobre su vida convulsa y su recuperación. Pero ése
no es el caso. Demi en su mayoría
trata los mismos temas que cualquier disco de pop: amores de sí, amores de no,
amores de sí pero no, amores de por favor.
A pesar
de caer en estos terrenos comunes y no contar ninguna historia en particular
sobre Demetria y su renacimiento desde las cenizas, su cuarto disco al menos
luce por su alta calidad en producción. Sí es un poco más de lo mismo, pero es
pegajoso y puede llegar al nivel de guilty
pleasure. Esto viene detrás de todos los coros que explotan
espectacularmente, su coqueteo con el dubstep
y la noción tanto en la música como en su voz de que -ya les decía al
principio- Lovato dejó de ser una niña. Es una mujer.
Quien
ha escuchado el lead single, Heart Attack, sabe perfectamente a lo
que me refiero. Otros tracks como Neon Lights o Never Been Hurt se mueven en esta línea.
Ahora
que sí existen momentos en los que Demi sobre-entrega, tal vez incluso
superando su status como princesa del bubble-gum
pop y haciendo que Kelly Clarkson tiemble un poquito. Se trata de las
baladas. Demi se juega la voz en la cancha con Nightingale e In Case,
dos tracks que vienen seguidos a la mitad del disco: el único momento donde
Demi descubre un poco de su piel (como en la portada del CD) y nos deja ver más
allá.
Pero
la tercera balada triunfa sobre las otras. En Shouldn´t Come Back Demi le cierra la puerta en la cara al amor que
debe irse, y lo hace con una franqueza encantadora. Shouldn´t Come Back es la pista de a dónde podría ir la carrera de
Demi Lovato cuando madure por completo y esté lista para mostrar quién es ella
en realidad: sin capas de dubstep,
coros sobre-producidos y letras comunes.
En
conclusión Demi Lovato está destacando sobre sus compañeras de clase por las
razones incorrectas… y las correctas también. Su cuarto álbum Demi está comenzando a mostrar madurez,
tiene un alto nivel de producción, baladas memorables y da las pistas de a
dónde podría apuntar su carrera cuando se decida a dejar de mascar su bubble-gum y tirarlo a la basura.
Mientras la pregunta persiste: ¿Quién es en realidad Demi Lovato?
Calificación: 6 de 10
Tracks recomendables: Shouldn´t Come Back, In Case, Nightingale
Emeli Sandé, Our Version Of Events
Por:
Nacho Azcárate
Es algo
raro que Emeli Sandé apenas empiece a causar revuelo en México. Desde el 2012
ha dominado las listas en el viejo continente con singles extraídos de su disco Our
Version of Events, que incluso ganó el Brit Award por Mejor Disco Británico.
Pero su experiencia no se limita a éste, su primer álbum. Sandé ha escrito para
varios artistas como Susan Boyle y Leona Lewis, abrió la gira Mylo Xyloto de
Coldplay y fue nombrada por Simon Cowell como su cantautora favorita.
Desde
este lado del charco, parece que la fiesta gris que Adele organizó para gente
triste por fin se acabó. Por primera vez en dos años -desde el lanzamiento de 21- paró de llover en el Reino Unido.
¿Pero acaso es Emeli Sandé el sol que esperábamos después de la tormenta?
Heaven, primer single,
abre con el tempo más rápido del
disco y permite que Sandé luzca la potencia de su cuerdas vocales. En este track ella le da voz a aquellos
desafortunados que quieren vivir positivamente pero el día a día en condiciones
miserables los desilusiona, los tira. Tres minutos después ese tempo rápido termina y abre paso a las baladas
del álbum donde la verdadera personalidad de la cantautora se evidencia. A
pesar de que su música es sobre temas sociales como el mencionado, Sandé no es
una mujer enojada o resentida (olvídense del arquetipo de las cantautoras
noventeras).
Sino
todo lo contrario. Emeli Sandé es como la amiga que mejor puede consolarte, el
hombro en el que lloras toda la noche hasta quedarte dormido, la novia a la que
le cuentas tus peores vivencias y a cambio te da consuelo y esperanza. Este
carácter afable permea en sus canciones. Where
I Sleep, Breaking the Law y River
son ejemplos excelentes. Canciones ricas para dormir bien cobijado.
Sin
embargo, la fortaleza de su dulzura también se convierte en su debilidad. Emeli
Sandé se mueve demasiado en este terreno: cantado en la intimidad y al oído,
tomando pocos riesgos con más tracks
uptempo que pongan a prueba su versatilidad. Jugar a la segura también
afecta la arquitectura de sus canciones: la mayoría son demasiado predecibles. Our Version of Events vive en esa
dualidad de poner el corazón a descansar pero al mismo tiempo ser cansado.
Faltan vueltas, riesgos, novedad. Maybe
y Suitcase sufren en este respecto.
Next to Me, quizás el single más exitoso en México, llega a romper cerca del final del
álbum y ofrece uno de los últimos destellos de movimiento y frescura. Quizás no
es suficiente para cambiar la historia completa que es más bien tenue, pero al
menos sí es de los momentos más memorables.
En el
Reino Unido paró de llover y al parecer lo mismo está sucediendo en el resto
del mundo. Quienes ya lloraron con Adele, ahora encontrarán consuelo a sus
lágrimas en los temas esperanzadores de Emeli Sandé… aunque Our Version of Events no brilla lo
suficiente para iluminar ese cielo nublado por completo. A Sandé le falta
romper con la estructura, buscar variedad, tomar riesgos. Reitero, Our Version of Events vive en esa
dualidad de poner el corazón a descansar pero al mismo tiempo ser cansado.
Calificación: 7 de 10
Tracks recomendables: Where I Sleep, Breaking the Law, River, Next to Me.