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Después de realizar unos comentarios homofóbicos, Durante una entrevista de televisión Matthias Le Goff, el subcampeón del mundo de waterpolo, hace un comentario homofóbico y por ello el comité del deporte decide condenarlo a entrenar a “Los camarones de diamantina”, un equipo gay de waterpolo, que está en un muy mal lugar de clasificación para ir a los Juegos Olímpicos gay, pues los camarones están más interesados en la fiesta, que en la competición. Aun así, ellos quieren clasificarse para ir a Croacia para participar. Matthias deberá de confrontar no simplemente el singular “espíritu competitivo” del equipo, sino numerosas situaciones que lo llevarán a revisar sus prioridades en la vida.
Un cocktail de camarones con cola brillante (y multicolor)
Co escrita y co dirigida por Cédric Le Gallo, y Maxime
Govare, y basada en la experiencia de Le Gallo con su equipo de waterpolo gay real,
mezcla la comedia y la reivindicación de los derechos de la comunidad LGBTQ+ en
una cinta que termina siendo además de colorida y cómicamente desfachatada una
feeling good movie donde la enseñanza de la inclusión se logra administrar al
protagonista homofóbico: Matthias Le Goff (Nicolas Gob), de una manera efectiva
y emotiva.
Es evidente que los mundos del deporte y la lentejuela gay
no parecieran encajar de manera natural en una trama, pero Le Gallo y Govare lo
logran con una formula muy básica: detracción-castigo-rebeldía-involucramiento-
sentimientos-enseñanza.
Obviamente Matthias va a cumplir un castigo y no desea
por ningún motivo desempeñar ese trabajo de entrenador y muchísimo menos a un
equipo que piensa más en la fiesta y el ligue que en los rigores de la
competencia, aunque sin embargo desean irse a “dar una vuelta” a las Olimpiadas
gay (los otros motivos son obvios)
El primer encuentro no es placentero y obvio Matthias
quiere desistir, pero ese es simplemente el primer paso de su “enseñanza de
vida” debe aceptar reticentemente que sus “alumnos” que son bastante mediocres
deportivamente son una familia que ha luchado por sus derechos y su lugar en el
mundo, el espíritu del grupo es la primera confrontación entre el estilo
unilateral de un nadador individual y un equipo con intereses diversos enfocados
a ser compañeros.
Una familia con muchas plumas
Evidentemente alrededor del equipo se plantean los
personajes que lo conforman como Jean el capitán y fundador del equipo que
además es chef, Alex (David Baiot) un afrodescendiente es la ex pareja
de Jean.
Está Cedric (Michael Abiteboul) un hombrón que ha debutado como
padre de familia con su pareja gay y que trata de presentar una imagen de
trabajador dedicado, está Joel (Roland Menou) un aguerrido combatiente
de los derechos gay desde su ya lejana juventud que critica el compromiso a la
causa de sus jóvenes compañeros y están el fiestero Xavier (Geoffrey Couet) y
el tímido Damien (Romain Lancry) además de un debutante fuera del closet
Vincent (Felix Martinez).
Pero lo inesperado es un excompañero que
regresa al equipo: Fred (Romain Brau), como compañera… todos, más que
equipo, son una familia. Completamente emplumada, pero familia al fin.
Matthias no puede ser más diferente de ellos. “Viva la diferencia!”
Políticamente incorrectos y ¡gozándolo!
Para quién no esté familiarizado lo
suficiente con el mundo LGBTQ+ habrá detalles que pasarán inadvertidos pero para
quien sepa leer la plana completa la película va a ser más que ver a un grupo
de hombres gays en un roadmovie como los que hace ya muchos años (1994) presentaron
en “Priscilla la reina del desierto” (claro sin la profusión de los números
musicales de aquella, aunque acá los haya) lo divertido es que estos camarones
son sin exceso de pestañas, pelucas y lentejuela.
Son hombres gays pasando el tiempo de sus vidas mientras llegan
a Croacia a los juegos Olímpicos Gay (que dicho sea de paso comenzaron a
celebrarse en 1982) y se concentran (como pueden) en ser mejor equipo. Lo que si
son es los mejores amigos.
Ríete contigo… o de ti
El humor específicamente gay tiene sus propias reglas y se
caracteriza por no tomarse demasiado en serio de una manera muy desfachatada si
lo quieres, o al menos así solía ser, hasta que las nuevas reglas consideraron a
todo “tema sensible” y la mal llamada “sensibilidad por las minorías” inundó
con fuego abrazador todos los temas de discusión.
Ya no se puede “ser sencillamente políticamente
incorrecto” es un fallo astronómico en la nueva conciencia y los camarones se
brincan esa tranca con la mano en la cintura y speedos muticolores.
Eso hace a
la película fresca, no se anda con correcciones, no pide permisos y es tan gay
como un soufflé de fresa. De Gallo no pierde el tiempo con explicaciones ni restricciones;
sus personajes son reales, no son más que lo que son: gays, y que el mundo
ruede.
¡Al agua patos!
El deporte y el colectivo LGBTQ+ pocas veces han tenido
este enfoque en el que el giro está en que no es la historia de un gay
queriendo adaptarse al entorno deportivo/competitivo/duro donde sus
preferencias sexuales serán cuestionadas y (eventualmente reprobadas/juzgadas)
sino que es todo lo contrario, es la conquista del colectivo de un deporte usándolo
como medio de inclusión. Donde sin pena y empacho alguno, abiertamente, se puede ser gay
porque... ¡son un equipo gay que quiere ir a los juegos olímpicos gay! Ya mas
claro que eso, imposible.
Aquí el que debe adaptarse es Matthias, que es la
minoría dentro de este universo, sucede que por accidente se entera de cierto
detalle de Jean y por ello comienza a comprender por qué hacer que los
camarones lleguen a las Olimpiadas es tan vital.
Por otro lado se encuentra
con que su hija adolescente le impulsa, emocionada por ver que Matthias logre
hacer que el equipo gay compita y que Matthias venza su homofobia.
Entonces, su concepción del mundo es desafiada, en base no a los prejuicios, sino al sentimiento de amistad y compromiso, Matthias capta su lección y ejerce un cambio; prácticamente se lanza al agua de cabeza y con convicción.
Conclusiones
Es divertida, sí, es irreverente y pícara, sí, tiene su moraleja
y su lado de “inclusión” sí… Al final los camarones logran hacer una declaración
visible. No todos los gays son vestidas, son hombres y como a cualquiera les
suceden cosas, tienen sus fortalezas y debilidades y las sacan a flote a su
manera.
Pero el amor es el mismo, la presión laboral es la misma, los deseos de
superarse son los mismos para cualquier ser humano, sin importar sus preferencias
sexuales. Y todos, igualmente, buscan su propio, reluciente y feliz lugar bajo
el sol… o dentro de una piscina.
Directores: Maxime
Govare (co-director), Cédric Le Gallo (co-director)
Reparto:
Nicolas Gob… Matthias
Le Goff
Alban Lenoir… Jean
Geoffrey Couët … Xavier
Michaël Abiteboul... Cédric
Jonathan Louis… Gogo dancer
David Baïot… Alex
Romain Lancry… Damien
Roland Menou… Joël
Thomas Croisière… Pascal
Felix Martinez…Vincent
Romain Brau…Fred
Pierre Samuel... Bertrand
Maïa Quesemand… Victoire
País: Francia
Año: 2019
Género: Comedia, Deporte
Duración: 1h 43min
Clasificación: N/A
Escritores: Cédric Le Gallo (guion), Maxime Govare (guion)
Fotografía: Jérôme
Alméras
Música: Thomas Couzinier, Frédéric Kooshmanian
Fecha de estreno en México: 23 de Octubre 2020
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