Por Julia
Elena Melche.
Con mayor o
menor acierto y desde diferentes lecturas, el fascinante mundo de la moda parisina
y sus creadores han sido llevados al celuloide con Prêt-à-porter (94), Coco
antes de Chanel (2009), y dos filmes sobre Yves Saint Laurent, entre
los más recientes.
En Dior y yo el realizador galo afincado en Nueva York Frédéric
Tcheng, lleva al espectador en un delicioso recorrido por los interiores de la
legendaria casa de modas Christian Dior, para que sea testigo del proceso
creativo desde los talleres, de costureras, artistas y trabajadores en un momento significativo de
la firma francesa: la llegada como director creativo de Dior del belga de 44
años Raf Simons, un diseñador de modas, dedicado en un principio a la ropa
masculina, y cuyo nombramiento sorprendió a muchos por considerarlo minimalista,
seguramente por su labor como director creativo de la ropa masculina y femenina
de Jil Sander, una
reconocida diseñadora alemana cuyos diseños se caracterizan por sus líneas
simples y sencillas, desprovistas de todo exceso.
Es abril del
2012 y Raf Simons se
enfrenta a su primer reto, el lanzamiento de su primera colección de Alta Costura
para otoño-invierno 2012-2013 en tan solo 8 semanas. Simons sabe que debe estar
a la altura del legado de la casa y respetar sus códigos estéticos
tradicionales. Su labor será adaptar su estilo moderno, en mucho atrevido y
audaz, pero siempre elegante, al romántico de la emblemática “maison”, y logrará
conseguirlo de una manera innovadora.
La cinta
tiene como punto de partida evocaciones del diseñador Christian Dior, quien
rememora cuando empezó en el número 30 de la avenida Montaigne a la edad de 41
años, que se ilustran con
fotos e imágenes de archivo para recordar la atmósfera y glamour de la época de
mayor gloria de la casa de modas.
Era 1946 y Francia se recuperaba de los
estragos de la Segunda Guerra Mundial. Su sociedad, inmersa en la depresión,
necesitaba recuperar el optimismo y Dior supo hacerlo con sus lujosos diseños que
causaron sensación por su estilo glamoroso que resaltaba la figura femenina,
dándole a la moda un nuevo impulso y definiendo la estética de los años
cincuenta.
Interesado en
el universo de la moda, el cineasta se desempeñó como productor y editor de Valentino:
El último emperador (2008), un documental sobre el prestigiado
diseñador de modas italiano y dirigió en 2011 Diana Vreeland: La mirada educada,
un retrato íntimo a la vida y trabajo de la mujer que transformó el mundo editorial
de las revistas de moda y
dio su toque más que personal al mundo del diseño, convirtiendo Harper’s Bazaar y Vogue algo más que
revistas de consejos de moda y belleza.
Ahora, retrata
las dificultades de un proceso creativo y la adaptación de los trabajadores con
un nuevo jefe y su manera de trabajar, capturando la tensión, conflictos,
nerviosismo y esfuerzo de las costureras y modistas para crear los vestidos que
desea Simons y terminar a tiempo para el desfile. Pero el diseñador también
sufre por la presencia de las cámaras de filmación que irrumpen su privacidad y
por ver terminada su colección.
Sin duda, un
documental que no dejará al espectador indiferente al conocer todos los detalles
que existen detrás de cada vestido y quienes lo elaboran y especialmente quedará
fascinado con el espectacular desfile con grandes figuras del cine y de la moda
y cuyos cinco salones fueron cubiertos
por un millón de flores de diferentes variedades y de un tono por cada salón.
Muy
recomendable.
Dirección y
guión: Frédéric Tcheng.
Reparto: Raf Simons, Marion Cotillard, Anna Wintour,
Marc Jacobs, Isabelle Huppert, Jennifer Lawrence, Sharon Stone.
País:
Francia.
Año: 2014.
Género:
Documental.
Duración: 90
minutos.
Clasificación:
Todo público.
Fecha de
estreno en México: 21 de octubre de 2016.
DIOR Y YO
(DIOR ET MOI) SE EXHIBE EN CINÉPOLIS Y EN CINETECA NACIONAL.
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