432 Magazine: DOCTOR STRANGE EN EL MULTIVERSO DE LA LOCURA (DOCTOR STRANGE IN THE MULTIVERSE OF MADNESS)

domingo, 8 de mayo de 2022

DOCTOR STRANGE EN EL MULTIVERSO DE LA LOCURA (DOCTOR STRANGE IN THE MULTIVERSE OF MADNESS)

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Por Fabián Quezada León

Doctor Strange en el Multiverso de la locura, confirma de una manera tajante la ventaja del MCU en cuanto a reinventar la historia, escapando a todas las posibilidades narrativas que la tradición marca. No simplemente se guarecen bajo la enorme sombrilla de que "en la fantasía todo es posible" sino que dan una y otra vez declaraciones acerca de que, en cuestión de nuevas narrativas, se atreven más que nadie antes.

Ya habíamos tenido probadas en las cintas previas a Doctor Strange en el multiverso de la locura y con esto abren la llav,lo que se necesite. En este multiverso no hay arriba, ni abajo, ni antes, ni después, ni vida, ni muerte definitiva.

¿De qué va?

Mientras pretende tener un “día normal” Strange (Cumberbatch) se ve inmiscuido en un incidente que lo deja al cuidado de America Chavez (Gomez) una chica que tiene el don de trasladarse entre diversos universos, el defectillo es que America no controla su inigualable poder y existen quienes darían, literal, todas las joyas del universo para hacerse de esa bonita cualidad. Sobre todo una vieja conocida que desea inmensamente trasladarse a otro tiempo y espacio.

¿Un pequeño paso para el hombre?

Desgraciadamente, como hemos aprendido ya por otras entregas de Marvel, este deseo de caminar entre universos no es algo que se pueda hacer sin correr algunos “ligeros riesgos” como, por ejemplo, aniquilar por completo la vida en la realidad circundante.

Debido a eso y al natural enfrentamiento entre fuerzas que desean ganar (no sin justificación) su boleto a su anhelado destino, (aunque hay quienes opinan que acabar con la realidad habitada es demasiado caro) es que Strange se ve obligado a sobrepasar ciertos límites y buscar, literal, soluciones en cualquiera de los universos posibles. (Obvio al hacerlo va a toparse con aliados y enemigos inesperados y cuasi inimaginables, (sorpresas que no podemos spoilear)

Lo interesante es que la historia logra desarrollarse sin problema, de una forma orgánica y las aparentes fuerzas contrarias poseen el poder justificativo suficiente como para que el espectador pueda jugar a inmiscuirse en un devaneo constante de "a qué lado va a apoyar".

Evidentemente, Stephen posee unos compañeros de viaje en su entorno inmediato que conocemos y apreciamos (sobre todo a Wong) además hay una línea romántica muy poco trabajada en esta ocasión con Christine.

Sin embargo la irrupción de America rompe la burbuja de lo cercano, lo lejano y lo posible, gracias a sus singulares poderes se convierte en la intersección entre universos y todas las infinitas posibilidades que esto desencadena desde el primer instante.

Así que al final no solo fue un pequeño paso para el hombre sino un monumental multidiverso paso para la narrativa de las historias de ficción, cosa que todos deberíamos de considerar porque ya no hay barrera para lo posible y lo imposible, sino una permeable frontera entre ambas que lo asemeja, lo más posible, al terreno de los sueños.

Perdón, ¿en qué multiverso dice que estamos?

Algo que vale la pena es percatarse de que queriéndolo o no, el simple hecho de ver la película nos inmiscuye en un multiverso real. Si pensamos que la historia de Wanda se remite a Wandavision, la serie de Disney+: dos medios, dos historias y forzosamente dos universos que se funden (si esto hace despertar tu curiosidad, corre a Disney+ a ver la serie.)

Pero si buscamos las raíces de todo debemos con justicia voltear los ojos hacia el escritor y creador de este poderoso concepto del multiverso: Michael Waldron que vino a proporcionar el botón detonante para materialmente “hacer lo que sea” dentro del terreno de la ficción, y pésele a quien le pese, jugar con la multidimensionalidad jamás había sido tan fácil, ni abierto tantos campos como ahora. Con franqueza las potencialidades son infinitas, no hay exageración en esto. Definitivo, la gramática de ficción debe de pararse a aplaudir rabiosamente esto.

En boca cerrada...

No podemos hablar más profusamente de la película porque de un momento a otro comenzaríamos con los spoilers y no vamos a hacer eso. Lo que sí podemos es poner la atención en el trabajo de Raimi y los principales actores de la trama.

Raimi es un viejo conocido del universo Marvel, no en balde dirigió la trilogía de Spider man, pero lo notorio en este regreso es que toma un tema que ya había trabajado otro director y lo maneja hasta transformarlo en propio, dándole su sello innegable, fortificado por su afición al cine de terror.

No es que Doctor Strange y su mundo de locura sean precisamente de terror, sino que posee pinceladas de escalofrío que regocijan y cobijan la locura. Van encajando para incrementar la diversión. Así mismo Raimi nos regala secuencias de alucine total, donde el mismísimo Escher saltaría de gusto entre runas, pentagramas y fragmentos de muros donde no existe el arriba ni el abajo.

Raimi llega y su fama lo precede. Además de Spidey recordemos que entre su producción podemos encontrar cintas como Darkman, o thrillers como A Simple Plan, The Gift y que lo mismo ha realizado películas de temas deportivos como For the Love of the Game. Podemos decir entonces que no tiene plato aborrecido y que también personalmente ha traspasado varios universos, lo que lo hace un guía ideal para la misión de Strange.

Confía, solo confía.

Como toda película de super héroes que se respete, vas a ver enormes secuencias de pelea y de efectos especiales (hasta con recomendación para personas foto sensibles) algo de humor ácido y varias inevitables referencias a otros universos, para ir conduciendo al consumidor a esta nueva gramática que seguramente será usada en las posteriores cintas de Marvel.

Para hacer todo esto posible, el arsenal de recursos técnicos es ilimitado (más si viene de Marvel) enfrentarse a estas posibilidades para Raimi debe haber sido como un día en Disneylandia con atracciones ilimitadas es para todos los niños. Así que si buscas acción, aventura y fantasía vas a darte un atracón.

Pero adicionalmente a esto el conflicto de los personajes es completamente humano y esto es un camino firme y que fluye para cualquier película, sea del género que sea, en la vida puede haber o no super héroes, pero conflicto humano siempre hay y eso engancha al espectador, porque como dirían por ahí: los super héroes y los super villanos también tienen su corazoncito.

Contemos además con el percatarse de que con una buena intención se puede cometer un grave error. Este es otro de los regalos que la trama ofrece,ver que según desde donde se mire, un aliado puede ser un enemigo o al revés.

Conclusiones

Doctor Strange en el universo de la locura no solo es la puesta en marcha de todas las posibilidades narrativas posibles que encuentran justificación, no importa lo alocadas que parezcan. En un universo diferente, las cosas pueden y deben ser diferentes. Raimi se luce en este regreso a la casa Marvel y sigue, en alianza con Waldron la regla de: la no regla, sin dejar de lado la cercanía del conflicto humano.

Transitar desde Westview y el universo de Loki hasta acá también marca un precedente y una realidad de que las dimensiones narrativas transcurren simultáneamente y tienen fronteras abiertas.

La trama provee a Strange y a Wanda de sus propios demonios que se desnudan ante nosotros y nos hacen divagar entre quien merece triunfar y quien es el verdadero héroe en cada dimensión, puesto que Marvel nos ha dejado muy claro que las acciones tomadas por los super héroes y sus antagonistas no siempre resultan en un acierto (ya te digo lo que puede provocar un chasquido de dedos)

La introducción de America en el universo como un personaje que proviene de una familia no tradicional, también es la apertura de la puerta para otro universo que seguramente dejará huella en la narrativa de superhéroes.

La verdadera riqueza de estos multiversos es la posibilidad de mostrar todos los ángulos posibles (y los no posibles) no solo de los efectos especiales sino de la dimensionalidad de los personajes, de explorar sus miedos y errores, sus “darse cuenta” y corregir el rumbo, aunque implique (literal) morir cien veces.

Tal vez esta sorpresiva innovación se convierta en una fórmula, no simplemente para Marvel sino para muchas otras franquicias, pero en lo que eso sucede, hay todo un vasto campo por explorar y muchos (más de los que imaginas) personajes que van a intervenir en estas historias.