viernes, 21 de febrero de 2020

BUSCANDO JUSTICIA (JUST MERCY)


Si nos visitas por tu celular/móvil/tablet te sugerimos girar la pantalla a horizontal o dar scroll down hasta el final y seleccionar la opción “ver versión de web” a fin de facilitar tu lectura. Gracias.
 

Por Fabián Quezada León

¿De qué va? 
 
Bryan Stevenson (Michael B. Jordan) es un joven abogado afroamericano egresado de Harvard que después de unas prácticas en la cárcel, se propone hluchar por los más necesitados. Hará lo que sea para aplicar debidamente la justicia. Desechando un futuro lucrativo en las leyes, Bryan decide defender a quienes estén injustamente acusados o no tengan representante legal, de manera gratuita. 
Así que se va a Alabama, apoyado por una amiga: Eva Ansley (Brie Larson).  En Alabama, se encuentra con el caso de Walter McMillian: conocido popularmente como Johnnie D. (Jamie Foxx) un afroamericano quien había pasado años (desde 1987) en prisión, acusado injustamente de la muerte de Ronda Morrisson, una chica blanca. 
Walter había pasado mucho tiempo en el pabellón de la muerte y parecía que todo estaba en su contra, lo impresionante es que todo el juicio se basaba en la declaración de un testigo: Ralph Myers (Tim Blake Nelson), (quien aparte era un criminal confeso) que fue sobornado para mentir, sin tomar en cuenta las declaraciones de familiares y vecinos que juraron que estaba con ellos al tiempo de que el crimen fue cometido
Bryan y su grupo de apoyo se ven envueltos en una intrincada red de mentiras, prejuicios y abusos de orden político, que parecieran correctos al manipular la ley. Sin embargo su lucha lo guía hacia la justicia.


El huevo o la gallina 

Es un hecho que el tema del racismo y las argucias legales (para enfrentarlo o defenderlo, dentro de grandes regiones de la América profunda) han sido motivo de innumerables cintas antes y será siéndolo después de Buscando Justicia.
Es irónico cómo en “la tierra del hombre libre y el hogar del valiente” gran parte de lo que podría denominarse: su historia se basa en esta lucha centenaria de racismo e intolerancia; que no simplemente se generaliza hacia los afrodescendientes, sino a todos los que no sean herederos legítimos de los peregrinos del Mayflower.
Da lo mismo si son aborígenes americanos, latinos, asiáticos o mediterráneos… lo cual es en sí una contradicción a la formación primigenia de Norteamérica: “la tierra de los hombres libres” pero el hecho es que aún en los comienzos de este siglo XXI la idiosincrasia de “hacer América grande de nuevo” ha llevado a muchas manipulaciones de las maneras “legales” de hacerlo.
Por ello, esta película sea una nueva llamada de atención sobre el tema. Cierto  que quizás no es la más famosa, ni la más publicitada, pero sirve sí, para poner otra raya al tigre.
Destin Daniel Cretton y su co-escritor Andrew Lanham, ponen el punto de mira no simplemente en los asuntos de la comunidad afroamericana, sino en un apartado aún más punzante: La legitimidad y transparencia de los corredores de la muerte.
Habrá, como en todo, quienes merecían esa pena, pero según las estadísticas (que se dan hasta después de ciertos créditos al final) hay un alarmante grado de error en los procesos dentro del sistema legal estadounidense.
Por ello merece poner un poco la atención en esta cinta, además del gran trabajo actoral que realiza su elenco.

Tan legal como lo legal…

Basado en una historia real, y en el libro escrito por el mismo Stevenson (fundador de la iniciativa Justicia Igualitaria) obviamente el punto de tema es toda la parafernalia legal y las increíbles maneras de que las argucias pueden colarse para dar giros de tuerca dentro de un juicio. La lucha de Bryan, las paredes que tiene que ir derribando y lo veleidoso que puede llegar a convertirse un proceso, son solo la punta de iceberg. 
Pero la historia humana detrás de cada caso es lo que en realidad le da un sesgo diferente a la trama que narran Cretton y Lanhamm. La sustancia dramática le da una calidez y una actualidad tremenda en este momento en el que en el mundo nada parece estar más confundido que la justicia. 
El desafío es ir más allá, encontrar las raíces del por qué el miedo y la discriminación pueden convertirse en un arma para meter a un ser humano al pabellón de la muerte, el papel que la ley, lo justo, y lo correcto juegan para observar cómo se puede tergiversar todo haciendo que la ley conceda ciertas prebendas a quienes tienen el poder y que aquello de que “la ley es igual para todos” es… una frase difícil de poner en contexto y más aún, aplicar.  
El tema de la justicia y la discriminación es y seguirá siendo, un punto de inflexión  en el cine norteamericano y después de tantas y tantas obras que lo tratan (como la que se cita en la película por el libro “Matar a un ruiseñor”) el aporte de Buscando Justicia queda un poco en el medio. 
Ya hemos visto películas de explotación, racismo, pabellones de la muerte… con el consabido inocente involucrado, y cómo el esfuerzo de los abogados logra abrirse paso en el denso sistema legal consiguiendo la libertad. 
Acá el esfuerzo se enfoca en mostrar un punto de la legalidad de la pena de muerte o “la transparencia de los procesos” que implica. Del porque la justa aplicación de la ley y su transparencia debiera ser un tema importante para las discusiones sociales hoy por hoy.

Uno, dos, tres por mi   

El sur de los Estados Unidos vuelve a ser la arena para que se presenten estos casos de discriminación y abuso de la ley: Alabama y el condado de Monroe, son el campo donde florece la historia. El guion da una cierta ironía en los diálogos de varios de los habitantes blancos del lugar que están sumamente orgullosos del museo dedicado a Harper Lee y “Matar aun Ruiseñor” que al contrastar con el paso histórico y con el argumento, parecen recriminar aún más el hecho de que: “mientras más cambian las cosas, más permanecen siendo en el fondo las mismas”.
El caso real en el que se basa la cinta pasó hace más de 40 años y sin embargo, la aplicación de la justicia en torno a la pena de muerte sigue teniendo graves lagunas legales.
Historias como las de Johnnie D., Herbert (Rob Morgan) y Anthony (O’Shea Jackson Jr.) siguen (y seguirán sucediendo no simplemente en Norteamérica sino en todo el mundo)
En medio de esta serie de acontecimientos y sus consecuencias, Cretton da a sus actores la oportunidad de lucirse sin opacar a los demás, cada uno posee sus momentos clave (incluso la mimetizada Larson) Foxx y Jordan soportan el peso principal. Es cierto que del personaje de Jordan no sabemos mucho más que lo que estrictamente tiene que ver con su desempeño profesional, pero cumple tal vez de una manera muda en sus gestos (sobre todo en una escena en la que es pasado a una revisión denigrante) nos muestra un fuego de rabia contenida que no empaña su labor social ni su concepto de la justicia.
Foxx por su parte nos entrega un Jhonnie D que va desgajando las emociones, un condenado que ha pasado lo peor y ha visto lo peor, pero que es inocente y que aún sumido en la desesperanza, puede reconocer una luz cuando la ve y se aferra a ella como su último recurso.
Pero quien tiene el hueso es el personaje de Rob Morgan, (Herbert Richardson) uno de los compañeros de Jhonni. Ex veterano de Vietnam, acusado de poner una bomba. 
Rob sufre de una serie de trastornos que deberían haberlo conducido a un sanatorio, no a un pabellón de la muerte. Y por eso su línea en la historia es tan fuerte.
La gama dramática envuelve perfectamente a todos los allegados en este relato.

Aunque la ruta de la trama es fácil de identificar: la detención arbitraria, la llegada del abogado incorruptible, los obstáculos de la ley ante la ley, el desamparo, las escenas de las audiencias con sus respectivos discursos, el recluso secundario sentenciado y la exoneración del protagonista.
Cretton no introduce ningún elemento cinematográfico destacable, pero sabe manejar el relato en una manera dramática cercana y eso le da un toque especial a la película

Conclusiones
Buscando Justicia no es ni la primera, ni la última (desgraciadamente) en exponer la extraña manera en la que la justicia es manipulada y adecuada a los intereses de la clase hegemónica. 

Tampoco es la mejor película sobre discriminación, racismo y pabellones de la muerte o los juicios a menudo express que hacemos basados en criterios de empatía o desagrado de grupos sociales, religiones y razas. 
Lo que Buscando la Justicia apunta es hacia el renglón de la veracidad en la exactitud en las sentencias de muerte (y en la pena de muerte misma) en la que en general los grupos sociales mas desprotegidos tienen cero expectativas de apelar su condena sin importar la rectitud del juicio.
De la misma manera, es una voz que dice que ante las mas cerradas situaciones siempre puede encontrarse la ayuda de un paladín: alguien lo suficientemente incorruptible como para confiarle la vida.
Tal vez sea buscar con la lámpara de Diógenes, pero… en medio de tantos despojos de humanidad, aún hay personas legales, justas y correctas. 

Director Destin Daniel Cretton
Reparto:
Adam Boyer: (Guardia de prisión)
Andrene Ward-Hammond: (Brenda)
Brad Sanders (Howard Stevenson Sr.)
Brie Larson (Eva Ansley)
Bryan G. Stevenson (Howard Stevenson Jr.)
C.J. LeBlanc (John McMillian)
Charlie Pye Jr. (Charlie )
Christopher Wolfe (Jim Wilkes)
Claire Bronson (Mrs. Chapman)
Damon Vance (guardia)
Darrell Britt-Gibson (Darnell Houston)
Drew Scheid (Linus)
Hayes Mercure (Jeremy)
J. Alphonse Nicholson (Henry Davis)
Jacinte Blankenship (Christy Stevenson)
Jamie Foxx (Walter McMillian)
Kirk Bovill (David Walker)
Lindsay Ayliffe (juez Foster)
Marcus A. Griffin Jr. (Charlie)
Michael B. Jordan (Bryan Stevenson)
Michael Harding (Sheriff Tate)
O'Shea Jackson Jr. (Anthony Ray Hinton)
Rafe Spall (Tommy Chapman)
Rhoda Griffis (Juez Pamela Bachab)
Rob Morgan (Herbert Richardson)
Steve Coulter (Judge Buren)
País: Estados Unidos
Año: 2020
Género: Drama
Duración: 136 min
Clasificación: Mayores de 15      
Basado en el libro escrito por: Bryan Stevenson
Guion: Destin Daniel Cretton y Andrew Lanham
Cinematografía: Brett Pawlak
Editor: Nat Sanders
Compositor: Joel P. West
Fotos: Warner bros 
Fecha de estreno en México: 21 de Febrero 2020

No hay comentarios: