Si nos visitas por tu celular/móvil/tablet te sugerimos
girar la pantalla a horizontal o dar scroll down hasta el final y seleccionar
la opción “ver versión de web” a fin de facilitar tu lectura. Gracias.
Por Fabián Quezada León.
This is the end of the world as we know it.
En pocas palabras, se ha corrido el
chisme en todo el universo conocido de que el viejo emperador Palpatine está de
regreso en el juego, pues existe una emisión que prueba que el emperador “no
estaba muerto, andaba de parranda”. Para esto, la resistencia sigue luchando y
ahora tiene un enemigo poderoso al que solo se le conoce como la Primera Orden
y el chico malo Kylo Ren (Adam Driver) está a la cabeza.
Rey (Daisy Ridley), la última heredera de la
orden Jedi ha estado muy ocupada entrenándose y teniendo fuertes luchas
internas tratando de encontrar “su centro”. Rey y sus colegas Poe (Oscar Isaac)
y Finn (John Boyega) van a tener la misión de salvar a todas las galaxias una
vez más.
Dio
comienzo una saga, una saga que nos hizo contemplar el universo y las galaxias
lejanas como territorios de aventuras, poblados por criaturas fantásticas,
saltos cuánticos, héroes a fuerzas, emperadores malvados y halcones milenarios,
era la creación de una leyenda galáctica y todos queríamos tener un R2D2 y un
sable de luz.
Y pasaron los años y la realidad superó a la ficción, pero jamás
le quitó un ápice de ese arrobamiento con el que vimos la primera batalla de
Luke contra Darth.
Las
opiniones se habían dividido desde “El último Jedi” y una multitud de fans y
críticos comenzaron a dar sus versiones de “lo que sería mejor”, así que para
preparar la conclusión de la más grande saga norteamericana de todos los
tiempos, las expectativas eran muy, muy altas.
Pero la respuesta ya visible es
que se trató de dar gusto a la mayor cantidad de fans… en muchos aspectos en
detrimento de la historia porque bien es sabido que “El que a muchos amos sirve”
… y Abrams y Terrio se metieron a un berenjenal, trataron de rescatar el origen
de la serie y de complacer a la base de fans y esa conveniencia, aunque
satisfactoria, puede acarrear un alud de cejas levantadas por más de una razón
entre críticos más difíciles de roer.
Es
difícil, si se ha seguido la saga a lo largo de tantos años, resistirse a la
nostalgia. A todo lo que ha sucedido mientras crecíamos con Star wars de fondo.
Pero
eso no debería de alejarnos de la objetividad.
Pero no simplemente a los
“protagonistas clave” sino que de visita llegan dos más para acentuar la
nostalgia y extender el amor de los fans por “aquellos tiempos”. Y estos
invitados más o menos son un resorte clave en la historia.
Como ya
es un establecido en los últimos años en el cine Hollywoodense, hay que rendir
pago a diversas áreas políticamente correctas para “de nuevo” complacer a todos
y sin duda, El ascenso de Skywalker es un detallito más a la corona de la causa.
Se
empodera a una mujer, (que está muy bien, pero no es nada nuevo) hay una
variedad de personajes representantes de casi todas las etnias (humanas y
galácticas) posibles y hasta hay una pareja gay, hay un eco de la hermandad
entre dos hombres y una chica, hay un beso robado… y hasta hay el bonito
momento de: “eres mi hijo”, ya con esto podemos imaginar las toneladas de hojas
de guion que se tuvieron que adaptar a llenar los deseos, darle diversión,
humor, aventura, crear iconos para los futuros desarrollos temáticos en los
parques de diversiones…
El conflicto con “el lado oscuro” pareciera resolverse
de una forma mucho más fácil de lo que podríamos pensar.
Dos horas
y veintitrés minutos. ¿Es demasiado poco? ¿Es demasiado largo? Depende.
Evidentemente hay demasiadas cosas que decir y centrarse en el conflicto
principal forzosamente dejará abierto (o sin una adecuada conclusión) otros
plots, pero es 
notorio que el tiempo sobra en algunas secuencias y que pasando
la mitad de la cinta los sucesos pasan sin cesar, para dar rienda suelta al
final de algo que se tardó mucho mas de casi dos horas y media en contarse.
Lo que es
poco satisfactorio es que hay momentos en los que se llega a sentir que hay
demasiados platos girando para poder atender correctamente a todos y
comparativamente, el principio, llega a parecer demasiado largo comparado con
la premura de tiempo para resolver todo.
El
Ascenso de Skywalker con todo de que no es todo lo buena que uno habría
supuesto, tampoco es tan mala que sea de las que abandonas la sala a los 20
minutos.
Sí, es cierto se apoya en la nostalgia, en el enunciado de que “hace
muchos años, en una galaxia muy muy lejana”… y está guiada en mucho para
satisfacer a demasiados fans de una manera aprobatoria.
Se vale de la introducción
de “elementos” nuevos que podrían o no ser válidos, pero que encuentran ecos en
toda la mitología de Star Wars y aún sin conocerlos plenamente como simples
mortales, hay que aceptarlos para alcanzar el final.
La película
tiene aceptables secuencias de acción y momentos de alivio cómico, como suele
ser la característica de la saga y probablemente nos provea de suficientes
cosas como para enriquecer atracciones temáticas en la tierra Disney, pero aún
con todo esto, queda 
en tela de juicio si logra cimbrar el mundo del séptimo
arte con el profundo impacto de ser el final de algo con lo que hemos vivido
desde los 70’s.
This is the end of the world as we know it.
El fin de
una era se cierra con el ascenso de Skywalker y no podemos decir demasiado sin
provocar “spoilers” baste decir que Rey tiene muchas cosas que dejar asentadas
consigo misma y con los otros personajes para dar cierre a algo que ha sido tan
largo como la vida misma y que desde que comenzó en una galaxia muy, muy lejana
(hace 42 años), ha dado mucho que hablar.
En pocas palabras, se ha corrido el
chisme en todo el universo conocido de que el viejo emperador Palpatine está de
regreso en el juego, pues existe una emisión que prueba que el emperador “no
estaba muerto, andaba de parranda”. Para esto, la resistencia sigue luchando y
ahora tiene un enemigo poderoso al que solo se le conoce como la Primera Orden
y el chico malo Kylo Ren (Adam Driver) está a la cabeza. 
Rey (Daisy Ridley), la última heredera de la
orden Jedi ha estado muy ocupada entrenándose y teniendo fuertes luchas
internas tratando de encontrar “su centro”. Rey y sus colegas Poe (Oscar Isaac)
y Finn (John Boyega) van a tener la misión de salvar a todas las galaxias una
vez más.
Cuando éramos niños…
Dio
comienzo una saga, una saga que nos hizo contemplar el universo y las galaxias
lejanas como territorios de aventuras, poblados por criaturas fantásticas,
saltos cuánticos, héroes a fuerzas, emperadores malvados y halcones milenarios,
era la creación de una leyenda galáctica y todos queríamos tener un R2D2 y un
sable de luz. 
Y pasaron los años y la realidad superó a la ficción, pero jamás
le quitó un ápice de ese arrobamiento con el que vimos la primera batalla de
Luke contra Darth.
Sí, años, muchos, han pasado y una parte de nosotros
esperaba con ansia el epílogo… y los creadores lo sabían. ¿Qué tanto llenaron
las expectativas? siempre será una batalla, mucho más épica que la de todos los
clones juntos.
Muchos amos a quien servir… ¿qué puede salir mal?
Las
opiniones se habían dividido desde “El último Jedi” y una multitud de fans y
críticos comenzaron a dar sus versiones de “lo que sería mejor”, así que para
preparar la conclusión de la más grande saga norteamericana de todos los
tiempos, las expectativas eran muy, muy altas. 
Pero la respuesta ya visible es
que se trató de dar gusto a la mayor cantidad de fans… en muchos aspectos en
detrimento de la historia porque bien es sabido que “El que a muchos amos sirve”
… y Abrams y Terrio se metieron a un berenjenal, trataron de rescatar el origen
de la serie y de complacer a la base de fans y esa conveniencia, aunque
satisfactoria, puede acarrear un alud de cejas levantadas por más de una razón
entre críticos más difíciles de roer. 
Es
difícil, si se ha seguido la saga a lo largo de tantos años, resistirse a la
nostalgia. A todo lo que ha sucedido mientras crecíamos con Star wars de fondo. 
Pero
eso no debería de alejarnos de la objetividad.
Y como
parte del recuerdo, pues, era bastante obvio que no deberíamos de perder a
nuestros tres protagonistas originales porque (amor de fan) los “veríamos” de
alguna manera antes de que todo terminara.
Pero no simplemente a los
“protagonistas clave” sino que de visita llegan dos más para acentuar la
nostalgia y extender el amor de los fans por “aquellos tiempos”. Y estos
invitados más o menos son un resorte clave en la historia.
Claro que
tener a Carrie Fisher actuando después de muerta era una de las causas que
inquietaba a la audiencia.
Buscad a la mujer…
Como ya
es un establecido en los últimos años en el cine Hollywoodense, hay que rendir
pago a diversas áreas políticamente correctas para “de nuevo” complacer a todos
y sin duda, El ascenso de Skywalker es un detallito más a la corona de la causa. 
Se
empodera a una mujer, (que está muy bien, pero no es nada nuevo) hay una
variedad de personajes representantes de casi todas las etnias (humanas y
galácticas) posibles y hasta hay una pareja gay, hay un eco de la hermandad
entre dos hombres y una chica, hay un beso robado… y hasta hay el bonito
momento de: “eres mi hijo”, ya con esto podemos imaginar las toneladas de hojas
de guion que se tuvieron que adaptar a llenar los deseos, darle diversión,
humor, aventura, crear iconos para los futuros desarrollos temáticos en los
parques de diversiones… 
El conflicto con “el lado oscuro” pareciera resolverse
de una forma mucho más fácil de lo que podríamos pensar.
Es lógico
que vemos suficiente de Rey (Daisy Ridley), Finn (John Boyega) y Poe Dameron
(Oscar Isaac), y obvio del malvado Kylo Ren 
(Adam Driver) y de repente sus
destinos emergen de “alguna parte de la galaxia” y no nos queda mas que seguir
la convención.
(Adam Driver) y de repente sus
destinos emergen de “alguna parte de la galaxia” y no nos queda mas que seguir
la convención.
El eje toral de todo es ¿Quién es Rey? ¿Por qué eso puede
transformar a todas las galaxias? He aquí por qué hay que “buscar a la mujer”…
Tan cerca y tan lejos
Dos horas
y veintitrés minutos. ¿Es demasiado poco? ¿Es demasiado largo? Depende.
Evidentemente hay demasiadas cosas que decir y centrarse en el conflicto
principal forzosamente dejará abierto (o sin una adecuada conclusión) otros
plots, pero es 
notorio que el tiempo sobra en algunas secuencias y que pasando
la mitad de la cinta los sucesos pasan sin cesar, para dar rienda suelta al
final de algo que se tardó mucho mas de casi dos horas y media en contarse. 
Lo que es
poco satisfactorio es que hay momentos en los que se llega a sentir que hay
demasiados platos girando para poder atender correctamente a todos y
comparativamente, el principio, llega a parecer demasiado largo comparado con
la premura de tiempo para resolver todo.
Conclusiones
El
Ascenso de Skywalker con todo de que no es todo lo buena que uno habría
supuesto, tampoco es tan mala que sea de las que abandonas la sala a los 20
minutos. 
Sí, es cierto se apoya en la nostalgia, en el enunciado de que “hace
muchos años, en una galaxia muy muy lejana”… y está guiada en mucho para
satisfacer a demasiados fans de una manera aprobatoria. 
Se vale de la introducción
de “elementos” nuevos que podrían o no ser válidos, pero que encuentran ecos en
toda la mitología de Star Wars y aún sin conocerlos plenamente como simples
mortales, hay que aceptarlos para alcanzar el final. 
La película
tiene aceptables secuencias de acción y momentos de alivio cómico, como suele
ser la característica de la saga y probablemente nos provea de suficientes
cosas como para enriquecer atracciones temáticas en la tierra Disney, pero aún
con todo esto, queda 
en tela de juicio si logra cimbrar el mundo del séptimo
arte con el profundo impacto de ser el final de algo con lo que hemos vivido
desde los 70’s.
“If
this mission fails, it was all for nothing. What we’ve done. All this time.”
Director:
J.J. Abrams
Daisy Ridley (Rey)
Adam
Driver (Kylo Ren)
John
Boyega (Finn)
Oscar
Isaac (Poe Dameron)
Carrie
Fisher (General Leia Organa)
Mark
Hamill (Luke Skywalker)
Anthony
Daniels (C-3PO)
Naomi
Ackie (Jannah)
Domhnall
Gleeson (General Hux)
Richard
E. Grant (Allegiant General Pryde)
Lupita
Nyong'o (Maz Kanata)
Keri
Russell (Zorii Bliss)
Joonas
Suotamo (Chewbacca)
Kelly
Marie Tran (Rose Tico)
Ian
McDiarmid (Darth Sidious / Palpatine)
Billy Dee
Williams (Lando Calrissian)
Harrison
Ford: (Han Solo)
País:
Estados Unidos
Año: 2019
Género:
Ciencia Ficción, Acción, Aventura,
Duración:
143 min
Clasificación:
Toda la familia
Guión:
J.J. Abrams, Chris Terrio.
Basado en
los personajes de: George Lucas
Música
Original: John Williams
Director
de Fotografía: Dan Mindel
Fecha de
estreno en México: 18 de Noviembre, 2019
No hay comentarios:
Publicar un comentario