EL ÚLTIMO CICLISTA.... EN EL TEATRO OFELIA

Por: Vicente Aristi

De Karel Svenk

Adaptación de Naomi Patz y Jana Sedova

Dirección Isaac Slomiansky

Con Diana Aguilar, Paola Comadurán, Raymundo Elizondo, Jan Esparza, Elsy Jiménez, José Ponce, Fabián Varona, Dettmar Yáñez y Fernando Zamora.

Teatro Ofelia

Con el teatro como pretexto de diversión, para los “huéspedes” de un campo de concentración Nazi, se desarrolla una puesta en escena de una obra en farsa cómica llamada: El Último Ciclista.

Primero se nos muestra una realidad que debió suceder con estos personajes en su carácter de prisioneros y después se va desarrollando la obra como una pieza dentro de otra pieza.

El objeto de esta intrincada trama se resolvió usando los recursos de farsa para darle un toque de cine mudo y disfrutar de música en vivo que llena los fragmentos de los que consta la obra. Un chiste aquí, otro chiste allá, nos hace adentrarnos en un mundo fantasioso digno de cualquier mente caricaturesca. La resolución escénica se muestra como un teatro lleno de clichés y donde la acción rápida juega un papel predominante para llevarnos y adentrarnos en un mundo completa y absolutamente giratorio, posiblemente como la vida en sí es.

Estos personajes ignoran su destino y en la representación se van preguntando a cada momento, que será de su futuro, tanto en su realidad interna, como en su realidad actoral. Es de resaltarse que hay extraordinarias actuaciones para poder llevar a cabo la dualidad de estos sentimientos.

La propuesta tematica es muy interesante para todos aquellos que busquen un teatro diferente y que no raye en lo comercial y quieran adentrarse en aquellos mundos que los lleven a cuestionarse que las realidades no siempre están dominadas por el objeto de compra y venta, sino que el ser humano también tiene necesidades que no están llevadas por los intereses económicos sino por los del alma y sus necesidades eminentes.

Vale la pena aventurarse para conseguir una experiencia diferente en esta obra.