jueves, 29 de noviembre de 2012

54 MUESTRA INTERNACIONAL DE CINE: LA CAZA.



Por Julia Elena Melche.

El danés Thomas Vinterberg cuenta que en 1999 un terapeuta infantil le entregó unos documentos para que los leyera, pero no les prestó atención y los guardó. Diez años después se puso a leerlos y encontró  una historia perturbadora que había que contar. El resultado es La caza (Jagten, 12) un oscuro drama psicológico sobre un maestro de kínder en una pequeña comunidad de Dinamarca, quien es acusado de abuso infantil. No hay pruebas, sólo las palabras de su alumna, la pequeña Klara, hija de su mejor amigo Theo. Sin embargo, es despedido y todo el pueblo da por cierto que es un pederasta.

La estrella danesa Mads Mikkelsen, ofrece una interpretación contenida y sobresaliente que le valió el premio como Mejor Actor en el Festival de Cannes 2012, al meterse en la piel del maduro Lucas, un tipo amable y recién divorciado que trata de reconstruir su vida y la relación con su hijo adolescente, hasta que todo a su alrededor comienza a desmoronarse cuando una mentira infantil inocente crece hasta convertirse en un rumor que se expande rápidamente.

La caza comparte con Festen, la celebración (98) y Submarino (10), los anteriores filmes de Vinetrberg, el rompimiento de los lazos afectivos, la exploración de la culpa, la pérdida de la inocencia y un espíritu de tragedia que prevalece a lo largo del relato. De las atmósferas de compañerismo y armonía que se respiraban entre Lucas y sus amigos, deviene una paranoia colectiva que lo señala y busca castigarlo. Sobreviene el destierro, el odio ensañado en el cadáver de su mascota y un repudio que estalla en virulentas demostraciones de violencia, ya sea en un supermercado o en la misa de Nochebuena.

En su implacable mirada, el director se detiene en la observación de una sociedad predispuesta al prejuicio, a la obsesión por el linchamiento moral y a la estigmatización social. A partir de una convicción popular que nadie cuestiona, “los niños siempre dicen la verdad”, se debilita la presunta inocencia de Lucas y se cancela cualquier intento en su defensa. La adversidad que lo golpea resulta sobrecogedora, contagiando al espectador de su indignación e impotencia, pero también de su indolencia. En su infierno vivencial ha perdido afectos, se encierra en su casa y hasta su nueva pareja sentimental desconfía de él. No obstante, hay rastros de humanidad en la solidaridad de su compadre y de su hijo, incluso en los recelosos intentos de acercamiento de su amigo Theo y de su involuntaria acusadora, interpretada por Annika Wedderkopp, todo un hallazgo.

La caza, se sitúa durante las celebraciones navideñas, lo que la hace más punzante. El ritmo es fluido y de una tensión permanente. Abundan los primeros planos al rostro de Lucas que registran y subrayan su rabia y angustia. Su título hace referencia a la reprochable práctica de los varones de la historia; una tradición local que significa el paso de los jóvenes para convertirse en hombres, pero también hace alusión a la cacería de brujas  de falsos culpables.


EL DIRECTOR.

Junto con otros destacados cineastas daneses como Lars von Trier, Thomas Vinterberg fundó el movimiento cinematográfico Dogma 95 con el que buscó  recuperar la pureza  y la autenticidad de la obra fílmica y también terminar con la noción de autor en el cine. Su primera cinta, Festen, la celebración, ganadora en el Festival de Cannes 98, está realizada bajo las estrictas reglas del postulado, que consisten en no colocar la cámara en el suelo, no respetar los géneros fílmicos, no utilizar el blanco y negro, no recurrir a las voces en off, no hacer uso de música de fondo ni de iluminación artificial ni de filtros, usar cámara en mano, no presenciar un acto criminal en la pantalla, no dar crédito al director  y rodar en tiempo presente. Sus relatos son reflexivos y devastadores dramas sociales que incomodan, con personajes en crisis, gélidos y violentos, con silencios calculados y miradas que dicen todo. Con su acostumbrado estilo sobrio, el realizador abre en La caza, heridas sociales que nunca llegan a sanarse del todo.

Para información de horarios y sedes, consultar la página: www.cinetecanacional.net


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