ATENCIÓN: ESTA NOTA CONTIENE INFORMACIÓN
DETALLADA DEL CONTENIDO DEL EPISODIO (SPOILERS)
Percepción
Estos días en los Hamptons todo es
agitación, porque han comenzado a circular las lujosas invitaciones para el
esperado evento de “Fuego y Hielo” en el que se hará público el compromiso del
Señor Daniel Grayson con la señorita Emily Thorne. Aunque como bien es sabido,
hay muchas más cosas en que pensar en este rinconcito de la tierra…
Y alguien
que ha estado muy ocupada arreglando cosas es Emily, que además del compromiso
se ha puesto de creativa a hacer una copia del DVD de la entrevista de su padre
en el que descubre la paternidad de Charlotte… obvio esa cinta ya tiene
destino… sólo que será entregada a su tiempo.
Y alguien
que ha estado muy ocupada arreglando cosas es Emily, que además del compromiso
se ha puesto de creativa a hacer una copia del DVD de la entrevista de su padre
en el que descubre la paternidad de Charlotte… obvio esa cinta ya tiene
destino… sólo que será entregada a su tiempo. 
En medio de una glamorosa sesión de
fotos familiares en la mansión Grayson, Emily recuerda cuando conoció por
primera vez a Daniel. Y para quien creyera que fue durante aquella fiesta en el
yate… no-ho… de hecho la pequeña y retorcida Emily realmente lo había conocido
un tiempo atrás…
en un bar en una “noche de copas, una noche loca” en la que Daniel
estaba… como una cuba, tratando de quitarse la etiqueta de ser un Grayson…
entonces, esta chica que tiene mucho de astuta, digamos que recibió un “llamado
divino” para seguir condimentando su ansiada venganza.
en un bar en una “noche de copas, una noche loca” en la que Daniel
estaba… como una cuba, tratando de quitarse la etiqueta de ser un Grayson…
entonces, esta chica que tiene mucho de astuta, digamos que recibió un “llamado
divino” para seguir condimentando su ansiada venganza.
El patriarca Grayson, (William Devane)
padre de Conrad, llega de visita a los Hamptons. Obvio su llegada no tiene nada
de “accidental”. El hombre en definitiva fue atraído por la noticia del
inminente divorcio de su hijo, Conrad. 
Además de que siempre ha tenido una
“cierta debilidad” por nada menos y nada más que… Victoria. Así que aprovecha
para hacerle saber a la reina de los Hamptons que de su parte corre que el
divorcio “no se salga de control” y se ponga… desagradable.
Además de que siempre ha tenido una
“cierta debilidad” por nada menos y nada más que… Victoria. Así que aprovecha
para hacerle saber a la reina de los Hamptons que de su parte corre que el
divorcio “no se salga de control” y se ponga… desagradable.
Sí… bueno… señor Grayson,
lástima, creemos que llegó usted un poco
tarde para eso…
En fin, lo que importa es poner en
claro ante la sociedad que la familia está “unida” y presentar la mejor cara
posible ante la celebración del acontecimiento de la fiesta de compromiso.
Conrad, que no tiene un pelo de tonto, le deja saber a la “eficiente” Ashley
que esta tirándole piedras al tejado y que en definitiva, apostó por el lado
equivocado en esta guerra familiar. 
De la misma manera se disculpa con
Charlotte por, digámoslo así, “descargar” el enojo que siente contra Victoria
en ella. Lo único que le importa es asegurarse de que su niña esté preparada
para afrontar cualquier problema que se le presente.
Conrad, que no tiene un pelo de tonto, le deja saber a la “eficiente” Ashley
que esta tirándole piedras al tejado y que en definitiva, apostó por el lado
equivocado en esta guerra familiar. De la misma manera se disculpa con
Charlotte por, digámoslo así, “descargar” el enojo que siente contra Victoria
en ella. Lo único que le importa es asegurarse de que su niña esté preparada
para afrontar cualquier problema que se le presente. 
Charlotte, que es real y
verdaderamente una “hija de papi”, le responde que en definitivo podrá
enfrentar lo que sea, siempre y cuando él este a su lado. (¡La pobre!...) Emily alcanza a escuchar esa conversación y
eso le hace pensar dos veces antes de seguir adelante con el plan de enviar la
famosa entrevista reveladora a Charlotte. 
Por su parte y aún recuperándose de sus heridas, Jack en verdad ha pasado unos
días de infierno tratando de dar con el paradero de Amanda. 
Nolan trata de
darle una mano a su amigo y hacerle olvidar sus penas de alguna manera, así que
decide regalarle una… enorme pantalla de tele (¿En que estabas pensando Nolan???)
Aunque el regalo no está mal, es
evidente que por más grande que sea la tele no va a regresar a “FalsAmanda” de
donde sea que esté metida…
Pero si bien la tele no le va a dar
respuestas… tal vez… solo tal vez… ¿qué tal si prueba a buscarlas en el casette que se quedó
“extraviado” bajo la cama de Amanda?... bueno; pero ¡¿en dónde consigue uno a
estas alturas una manera de verlo?!…
Ah, ok… tal vez debiera preguntarle a…
¡Nolan!
Obvio a Emily le urge recuperar esa
cinta de manos de Jack, así que le pide a Amanda que lo cite en un hotel. Pero
la cita acaba en discusión. 
Definitivo, Jack no se va a quedar con
todas esas dudas, así que exige respuestas que no recibe… por lo que decide que
no regresará el casette. Al fallar ese intento, Emily pide a Nolan que borre la
cinta antes de que Jack la vea, pero Nolan no lo hace, está harto de que todos
estos secretos se estén llevando a su amigo en medio así que… ¡Oooops!!! Jack
ve el video. 
Ahí Amanda revela la identidad de la amante de su padre… ¡Victoria!
Al enterarse de esto, Jack intenta
hablar con Amanda, pero cuando ella no responde los llamados a la puerta, él
sale volado hacia otro lugar… quiere respuestas y va a ir tras ellas.
Amanda se le revela a Emily y le dice
que está harta de estarle haciendo caso y sale corriendo detrás de Jack, pero
él ya va lejos.
Su destino…La Mansión Grayson donde
irrumpe en medio de la recepción del patriarca Grayson arruinándolo todo
monumentalmente. Desde luego, no duda en desenmascarar el “affaire” de Victoria
con David Clarke y le pone claro a la reina que si no deja de mentir sobre
Amanda él va a empezar a decir toda la verdad acerca de ella… Desde luego, Jack
ha firmado su sentencia de muerte con Victoria. 
Y si de decir la verdad se trata, pues
Conrad aprovecha el momento fenomenalmente y como no queriendo la cosa, deja
“escapar” la noticia de que…bueno, el verdadero padre de Charlotte no es él… Además,
como cereza del pastel, niega rotundamente la versión que Victoria le dio a
Daniel acerca de que David abusó de ella: de eso nada, monada… ¡David y tú eran
amantes!
El pobre abuelo Grayson ve hundirse
ante sus ojos los planes de hacer un “divorcio civilizado” sin embargo, cree
que aún puede rescatar algo, así que “sugiere” a Conrad que debería “Abdicar”
la presidencia de las empresas Grayson a favor de Daniel. La petición es
“escuchada accidentalmente” por Victoria que después de esto al menos no se irá
a la cama con las manos vacías…
Charlotte esta devastada con la
noticia de su padre. Así que Declan intenta vanamente consolarla, pero la pobre
chica de verdad la está pasando fatal; menos mal que en el restaurant tienen a la mano algunas botellas para “olvidar
las penas”
La noche tampoco fue miel sobre
hojuelas para Emily, sabe perfecto que Jack se puso en el punto de mira de
Victoria y ella no se anda con medias tintas cuando de “eliminar molestias” se
trata… ¡Puf! Emily tiene un lío más encima…
Pero todo lo anterior es nada, cuando
al regresar a su casa descubre que el compartimento donde guarda su cofre con
los recuerdos y la información que le dejó su papá ha sido abierto. (Oh, Oh!!!)
En el lugar está la tarjeta de
confirmación para la fiesta de “Fuego y Hielo” asegurando que estará
presente… firmada con el nombre de Emily
Thorne
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