Ha
sucedido el cuasi aniquilamiento de la humanidad, la raza humana se ha
enfrentado con los carroñeros (unos no deseados visitantes del planeta) y ha
vencido pero el planeta prácticamente esta inhabitable, por lo que una vez que
se logre bajar la cortina definitivamente se declarará de parte de los
sobrevivientes el abandono del radioactivo planeta tierra para embarcarse hacia
Titan.
Bueno al menos esto es la version oficial, la version
que Jack Harper (Cruise) y Victoria (Riseborough) su compañera consideran cierta. Su misión es vigilar
que las torres que extraen los últimos recursos del planeta efectúen su trabajo
y que los carroñeros no saboteen la misión. Todo tiene una lógica más o menos
obvia para Jack pero él tiene un secreto muy bien guardado (al menos el primero
del que vamos a ser partícipes) hasta que en una exploración Jack se topa con
otros habitantes del planeta y se enfrenta a ir descubriendo graves verdades. Verdades
tan antiguas que se remontan a muchísimos años antes, cuando la guerra que
consumiría al planeta aún no se gestaba.
Aunque
el tema apocalíptico ha sido una constante en el cine y le ha generado
taquillas generosas a lo largo de la historia, de unos años para acá como si se
tratara de experimentar una especie de
exorcismo en el que hay que sacar todos los miedos que el Armagedón pueda
generar, la industria cinematográfica se ha dado a la tarea de imaginarlo una y
otra vez.
En esta
ocasión Oblivion es el muy bien
trabajado fruto de la colaboración entre el director Joseph Kosinski, que nos
trajo la nueva versión de Tron “Tron, el legado”, y del productor “El planeta
de los simios” Peter Chernin.
Oblivion
no solamente es un despliegue impactante y estremecedor de efectos y un
galardón para la ciencia ficción sino que además es una pieza con capas que
generan tramas alternos que irán surgiendo conforme pasen los acontecimientos,
evidentemente, no saliéndose de los patrones que una buena historia de ciencia
ficción requiere, por ejemplo tenemos la
fatalidad a ultranza, el despliegue de tecnología usada por los personajes, las
causas sobrehumanas, la extraña y misteriosa mujer y el control de la situación
por parte de una entidad cuya maldad permanece oculta; además de las
infaltables explosiones, naves, persecuciones, etc. Y en eso la película es
abundante o sea, el espectador de ciencia ficción saldrá regocijado de su
experiencia (mucho más si lo hace viendo la película en un sistema de
proyección como Imax; ahí si vale cada centavo el boleto) Explosiones, persecuciones
a bordo de naves extraordinarias, escenarios post apocalípticos poblados de
enemigos escondidos y héroes que luchan hasta el último aliento por lo que
creen.
Lo
mejor es que además la trama ofrece la oportunidad de desentrañar otros temas
subyacentes a solo ver naves espaciales, si se llega a plantear la pregunta (muy
sensible en estos días) de que sucedería en el planeta si se desencadena la
pérdida de nuestro único hogar.
Pero aún
hay más, al lado de toda la parafernalia de efectos se desarrollan estas tramas
paralelas que poseen una extraña carga de melancolía y desesperanza que van
rodando bajo un cielo cruzado de explosiones y se salpican hasta una historia
de amor y celos.
La historia
se ata mucho más profundamente al comprometernos como espectadores ante la vida
de Jack, Victoria y Julia (Kurylenko)
Cruise
una vez más en héroe de acción, pero también aportando un lado de inquietante
déjà vu cargado de una nostalgia por aquellos momentos que se perdieron (¿?) o
tal vez no, aún pasando sobre ellos la
destrucción del mundo. Y las dudas (y el descubrir la verdad) van a derrumbar
lo que se da por cierto, y el transgredir los órdenes va a resultar en una
rotura profunda donde la vida se replantea cuando se ha perdido nada más y nada
menos que todo.
Riseborough,
pulida y cortés da un sello de gélida y maquinal perfección, aunque no carente de
involucramiento al final del día, para soportar un importante ángulo en la historia
de Jack.
En
ambos lados del espectro de la trama además encontramos a Freeman y Leo que apuntalan
sutilmente la trama con su aval a la película.
Al
final no solamente Oblivion apunta a un público deseoso de disfrutar la ciencia
ficción sino que vale la pena analizar el desazón y la melancolía que van a
quedar como un ojo de “Dron” abierto más
allá de los efectos especiales y que llevará toda la carga de un recuerdo de
algo que tal vez fue, o va a ser o quizá nunca suceda.
Reparto: Tom Cruise, Olga Kurylenko, Morgan Freeman, Andrea Riseborough, Nikolaj Coster-Waldau.
País:
Año:
2013
Género:
Ciencia Ficción, Acción, Aventura
Duración:
2 hr. 5 min.
Clasificación:
Mayores de 13 años. Acción y violencia, Breves desnudos
Estreno
en México: 12 de Abril
No hay comentarios:
Publicar un comentario