432 Magazine: A LA MALA (A LA MALA)

viernes, 27 de febrero de 2015

A LA MALA (A LA MALA)

Por Fabián Quezada León

María Laura Medina, (Derbez) simplemente conocida entre sus amigos y clientas como “Mala” es una chica que, en su lucha por lograr un puesto como actriz, debe hacer muchas otras actividades. Así se la pasa realizando castings que de una manera u otra resultan en fallidos y exasperantes intentos por ser considerada una “actriz seria”

Mala tiene (como muchos que se mueven en el medio de la publicidad y el modelaje, que pasar varias “malas copas” pero nunca pierde la esperanza de que

llegue su gran oportunidad. Mala comparte el departamento con su amiga Kika (Papile) y “casi” con su amigo Pablo (Arrieta)

Kika le pide a Mala un gran favor en el que deberá poner en juego toda su capacidad actoral: Kika sospecha que su galán es muy ojo alegre así que contrata a Mala para que lo “seduzca” y saber de una buena vez si el sujeto le es infiel.

Mala al principio se resiste pero, una chica debe sobrevivir de alguna manera…

Su trabajo para Kika resulta en un éxito rotundo, el novio de Kika es “materialmente sorprendido con las manos en la masa” por lo que casi de inmediato varias “despechadas” comienzan a solicitar los “servicios” de Mala para descubrir a los infieles “infraganti”. Claro que para Mala esto solamente es un “trabajo” pero antes de lo que se imagina el destino le va a jugar una bromita.

Un día (y ya con su fama profesional recorriendo varios círculos) Mala tiene ante sí la oportunidad de su vida: un papel en una serie de médicos. El casting resulta un éxito, el papel “casi” es suyo… pero Patricia (Schmidt) la productora de la serie, condiciona el trabajo de Mala a que le haga un “favorcito”; debe seducir a su ex novio: Santiago (Ochmann) y hacerlo ver su suerte. Atraída por la oferta de al fin lograr su sueño como actriz, Mala pone todo de su parte

para lograr su cometido aunque nunca se imagina en que va a terminar la historia.

Teniendo de fondo la línea del “cazador cazado” A LA MALA nos lleva, gracias al ligero y efectivo guión de Issa López (Efectos secundarios, Casi Divas, Ladies Night) y Ari Rosen, y a la dirección de Pitipol Ybarra, a un relato fresco y sobre todo divertido, donde Aislinn demuestra que “de herencia le viene al galgo” y saca adelante el papel de una Mala “muy buena” para hacer su trabajo… hasta que se enamora.

Es evidente la buena química que existe entre los protagonistas (que al final derivo en un romance en la vida real) y el cómo fueron integrando su trabajo con sus compañeros para hacer una comedia romántica actual y sumamente natural.

La cinta va de lo cómico a lo dramático, y hasta a las secuencias de acción, con buen ritmo.

Mientras que la relación entre Mala y Santiago crece.

En medio de la trama vemos aparecer además numerosos cameos de varios famosos como el propio Eugenio Derbez, Iván Sánchez, José Rón, Facundo, Altair Jarabo, Siouzana Melikian, Patricio Borguetti, Claudia Lizaldi, y otros (hay más de treinta apariciones especiales en la cinta)

Como de costumbre en las comedias románticas, los protagonistas comienzan odiándose un poco para luego irse enamorando. Ochmann está muy a gusto en su papel de empresario seductor (y campeón de varias batallas amorosas) que gracias a su experiencia

descubre todos los intentos de seducción de Mala, pero, que al final acaba cayendo en ellos digamos que muy gustosamente.

Al mismo tiempo que la historia de amor, vemos las historias paralelas de Kika y Pablo y la presencia además de todo ese mundo “tras de cámara” en el medio de la actuación, el modelaje y la publicidad. (La sesión de shooting del comercial de tequila de Mala es muy divertida)

La música de la cinta estuvo a cargo de Rodrigo Dávila (vocalista de

MOTEL) y además hay participaciones de Daniel Gutiérrez de La Gusana Ciega, Natalia Sosa, Michelle Delamor y Juan Solo, lo cual le da una calidez y una contextualidad especial a la película.