Por Julia Elena Melche.
La figura del payaso malvado, utilizada en Juegos
diabólicos, Killjoy, el payaso diabólico, Los payasos asesinos del espacio
exterior y en la inmejorable Eso, entre otras cintas, aporta una
interesante variante fantástica en el reciente filme del cineasta estadunidense
Jon Watts, director mayormente de telefilmes y mini series, al colocar la idea
de lo perverso y lo maligno en un antiguo disfraz de payaso, que se va fundiendo
con la piel de quien lo utilice, hasta convertirlo en un demoníaco psicópata
con una incontrolable sed de sangre.
La cinta inicia cuando un dedicado padre de familia se
entera que el payaso contratado para la celebración infantil del cumpleaños de
su hijito cancela de última hora. Kent busca una solución rápida y descubre en
un viejo baúl en el sótano de una casa que está remodelando para venderla, un
traje de payaso con todo y nariz y peluca, y decide ponérselo para salvar el
evento y animar a su pequeño. Cuando termina la fiesta, el hombre intenta
quitárselo, pero no puede. La vestimenta y la nariz de plástico se han adherido a su
piel y la peluca de colores a su cuero cabelludo.
Si bien, El payaso del mal acumula
clichés y lugares comunes del género, el director y sus guionistas, conciben
una cinta que mejora y atrapa a medida que avanza, desarrollando una siniestra y
atractiva historia de horror, con un ritmo ágil y
un impecable maquillaje, encargado de ir transformando al protagonista en un
ente cada vez más aterrador.
Luego de arrancarse media nariz y de producirse
heridas en los brazos al tratar de desprenderse del disfraz, Kent será víctima
de una transformación física y anímica espeluznante, pues el demonio lo ha
poseído, ya que el traje está hecho con la piel y cabello del mismo Satanás,
quién según la leyenda, atraía a los niños fuera de sus aldeas hacia su
guarida.
El realizador se arriesga al innovar el tema del payaso
asesino y sin duda sale bien librado. Introduce atmósferas cochambrosas para remarcar el estado contaminado y trágico
del personaje, convertido en un asesino serial de niños que va perdiendo poco a
poco su humanidad hasta quedar atrapado en fuerzas diabólicas que le impiden
distinguir sus afectos paternales de sus impulsos asesinos.
Con malsanas y salvajes escenas sangrientas, la cinta sobresale
por el estupendo trabajo de Andy Powers como el atormentado padre-payaso, actor
de series televisivas como “Oz” y “Policías de Nueva York”, quien igual provoca
compasión que sentimientos de repulsión.
Dirección: Jon
Watts.
Reparto: Andy
Powers, Laura Allen, Peter Stormare, Eli Roth, Elizabeth Whitmere y Christian
Distefano.
País: Estados Unidos.
Año: 2014.
Género: Terror.
Duración: 102 minutos.
Clasificación: Mayores de 15 años.
Fecha de estreno en México: 22 de mayo de 2015.
EL
PAYASO DEL MAL (CLOWN) SE EXHIBE EN
CINÉPOLIS A PARTIR DEL VIERNES 22 DE MAYO DE 2015.
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