miércoles, 31 de agosto de 2016

UN SECRETO ENTRE NOSOTROS (THE BENEFACTOR , a.k.a FRANNY)




Por Fabián Quezada León

Franny (Gere),  es un excéntrico y rico filántropo, quien esconde un terrible secreto que tiene que ver con un accidente en el que mueren sus dos mejores amigos; Bobby y Mia, que son padres de Olivia (Fanning).
Atribulado, lleno de culpas y envuelto en una peligrosa adicción, se retira de la vida pública. Hasta que un día “x” Olivia le llama para avisarle que regresa a Filadelfia; se ha casado con Luke (James) y esperan su primer hijo.  Franny revive y de una manera absoluta y nunca sabemos si en su afán de librarse de la culpa o por  no muy claras intenciones sexuales, interfiere de manera caótica en la vida de la pareja.

Esta película es el estrepitoso debut en las grandes ligas de Renzi a cargo de la escritura/dirección y es el culmen de como una trama, que podría haber dado para mucho, se desdibuja y se malgasta en un caótico sinsentido.

El planteamiento se antojaba por lo menos morboso: un poderoso hombre quien aparentemente posee todo en la vida, se involucra de manera tóxica con quienes lo rodean; primero sus mejores amigos con los que lleva una relación, que podríamos denominar de “muy especial”… este ambiente es tan enrarecido que no sólo toca a la pareja, sino también a su joven hija: Olivia.

Si leemos entre líneas podemos saborear un subrepticio triángulo/cuadrángulo de atracción sexual/romántica: primero entre Franny /Bobby (Baker) Mia (Hines) que se extiende hasta Olivia. 
En breves escenas podemos ver esa intención, que de haber llevado más allá, hubiera dado un giro profundamente oscuro y sexual a la trama; porque es difícil descubrir sobre de quién van los intereses sexuales de Franny … o tal vez van sobre todos.

Cuando sobreviene la tragedia y Franny se retira a vivir entre cortinas cerradas y excesos de sustancias, Olivia escapa de su influencia pero no por completo.
Al regresar de la mano de Luke , pone frente a Franny la oportunidad demasiado tentadora de recrear ese sórdido triángulo amoroso que viviera años atrás.
Todo esto hubiera sido lo que hubiera construido una mórbida historia, donde el poder económico y el capricho jugaran roles protagónicos. Desgraciadamente eso no sucedió, ni sucederá. Todo elemento de suspenso es tirado alegremente por la borda, llegando a callejones sin salida que se resuelven de manera absurda. Renzi no logra cuajar, y debe insistirse, no por falta de posibilidades de la historia, sino porque da tantos giros que termina por marearse.
Los personajes y sus historias se quedan justo en el filo de las posibilidades y no una, sino muchas veces y eso va llevando al espectador de un “pequeño nerviosísimo anticipatorio” a un franco “a ver a qué hora”. Una y otra vez, se prepara una situación, se cree que se va a ella y de repente el camino se desvanece… dejando a los personajes, al espectador y al suspenso en el suelo.

Renzi tenía un elenco seductor: Gere, Fanning y James, como para poder haber organizado algo que hubiera dado escalofríos si hubiera construido correctamente los arcos de los personajes, si les hubiera dirigido hacia algún sitio, no dejarlos abandonados en medio de un lío al que se mete a fuerzas en un happy ending.

Coloca a Franny como un psycho con problemas de droga, culpabilidad, deseos frustrados, prepotencia, soledad y tampoco llega a ninguna parte, no explota los oscuros rincones de lo que un ser con ese poder y esos problemas pueda llevar a cabo, ni siquiera logra que podamos tener un mínimo acercamiento a comprender las motivaciones de su personaje central, los demás personajes secundarios parecen ser inmunes al extrañísimo comportamiento y apariencia de Franny y cuando hace unos pequeños arreglos en su apariencia sucede igual, no hay una extraordinaria sorpresa por esa “milagrosa recuperación”, inclusive le permiten estar cerca de un niño internado en su hospital (creepy!!!) las tablas y experiencia de Gere se quedaron fuera del foro y suponemos se dejó guiar por el sinsentido de Renzi. Al igual que Fanning y James que no pasan de ser un bonito atractivo visual sin mucho que hacer.

La trama coloca un re encuentro de Olivia con Franny y a partir de ello se trata de justificar los actos de él para acercarse a la muchacha.
En un primer escenario, se podría pensar que la presencia de Luke podría desalentar las intenciones de Franny, pero retomando el comentario de la relación con los padres de Olivia, la presencia de Luke parece funcionar exactamente de la forma contraria, dando un imán para que Franny; que se describe como un “solitario empedernido” se “interese demasiado” en la bonita pareja.(en ambos) 

Múltiples son los esfuerzos y gastos que Franny hace para “quedar bien” pero jamás se sienten como los delicados hilos de una telaraña para atrapar a sus inocentes víctimas, sobre todo porque cada vez que hace un acercamiento/compromiso con la pareja,  realiza una labor de reto que deshace el encanto.
El guión se desbarata entre las manos, la dirección es un limbo y los pobres protagonistas deben flotar entre la inexistencia de suspenso.
El único “secreto entre nosotros” que queda al descubierto a los cinco minutos, es que el secreto se quedó perdido por ahí. Simplemente desapareció… inclusive también para el escritor y director. Lástima que teniendo todas las posibilidades, no llegue a ninguna parte.


Director- guión: Andrew Renzi
Reparto: Richard Gere, Dakota Fanning, Theo James, Clarke Peters, Dylan Baker, Cheryl Hines
País: Estados Unidos
Año: 2015
Género: Drama
Duración: 92 min
Clasificación: Mayores de 15.  Uso y consumo de droga
Fecha de estreno en México: 26 de Agosto

No hay comentarios: