La migración, tema social candente y
preocupante que se ha endurecido en tiempos recientes debido a la creciente inestabilidad
de países de África, América Latina y de Oriente Medio, se ha convertido en un
asunto de emergencia ante los desplazamientos masivos y forzados de víctimas de
la pobreza, hambrunas y guerras.
El incremento del flujo descontrolado
de refugiados solicitando asilo en países europeos se agudizó en 2015, tratándose
así de la mayor crisis migratoria y humanitaria en Europa, después de la
Segunda Guerra Mundial. Refugiados y migrantes ilegales en condición de
vulnerabilidad, cruzan el Mediterráneo para ingresar a la Unión Europea a
través de Grecia e Italia, en su mayoría para continuar su tránsito hacia Europa
Central y Europa del Norte.
El
drama real del inmigrante africano de Burkina Faso Koudous Seihon a Italia, es el
tema de la ópera prima del joven realizador romano Jonas Carpignano quien narra
los hechos con honestidad para hablar de la violencia y las dificultades que
enfrentan los inmigrantes africanos en Italia.
Mediterránea, la odisea de
los refugiados sigue
a Ayiva (interpretado por el propio Koudous Seihon) y a Abas (Alassane Sy), dos
amigos procedentes de Burkina Faso que se encuentran en Argelia con el fin de llegar a Italia en busca de
mejores oportunidades laborales. El camino será largo y dificultoso, cruzando
fronteras y atravesando el desierto bajo temperaturas terribles y los ataques de
saqueadores armados, hasta llegar a Libia y pagar a unos traficantes del lugar
para embarcarse en una lancha neumática destartalada y sin salvavidas, con el
fin de cruzar el mar mediterráneo rumbo a la costa italiana junto con algunos
conocidos.
Al
llegar a Calabria, en la ciudad portuaria de Rosarno, se ven obligados a laborar
como ilegales cosechando naranjas por unos cuantos euros, encontrándose con la
explotación del patrón y las pésimas condiciones de trabajo, además del rechazo
de los habitantes racistas y xenófobos del pueblo.
Los
protagonistas, actores no profesionales que accedieron a ponerse frente a la
cámara para interpretarse a sí mismos, desempeñan un trabajo notable y convincente
que trasmite al espectador toda la desazón de su travesía, en especial Koudous
Seihon, quien, motivado por su propia experiencia, deja ver en su rostro la
angustia y la rabia por la discriminación, la ilusión por tratar de encontrar
la manera de enviar dinero a su hermana e hijita en África, con quienes se
comunica a través de Skipe, y el desencanto y desánimo permanentes ante lo
incierto de su nueva vida, muy distante a lo que él tenía en mente.
No
obstante toda la hostilidad y dificultades que rodean a Ayiva y Abas,
encontrarán apoyo en una madura y buena mujer, conocida como Mamma Africa, quien
se dedica a ayudar a los refugiados ofreciéndoles comida y alojamiento.
El
cineasta aborda el conflicto sociopolítico de manera emotiva y humana,
utilizando cámara en mano, lo que le da a la historia un aire de documental. Su
interés por esta historia tiene su origen en una serie de disturbios callejeros
que tuvieron lugar en el poblado de Rosarno en 2010. Luego de que un trabajador
africano fue asesinado por un ciudadano local, la comunidad negra en Calabria
salió a marchar y a quemar automóviles en las calles como señal de protesta. El
director conoció a Koudous Seihon durante una marcha que conmemoraba el
aniversario de la matanza y revuelta de africanos.
Antes de realizar el largometraje, el director
y su actor llevaron a cabo un par de cortos referentes al mismo tema: A
Chjàna (2012), que recrea el levantamiento de 2010, y A
Ciambra (2014), que retrata al pequeño Pio, un niño callejero y
tramposo que vende artículos electrónicos robados en Rosarno, es adicto a los
cigarrillos y aparece en Mediterránea,
la odisea de los refugiados.
Premiada
en los festivales de cine de Estocolmo, Estambul, Belgrado, Zúrich, El Cairo, entre
otros, la cinta se aleja del melodrama, maniqueísmos y de la autoconmiseración.
En su lugar, se guía por la emotividad al retratar con autenticidad la crisis
migratoria y la lucha diaria por la supervivencia de seres envueltos en la
melancolía y la añoranza por la tierra y seres queridos que han tenido que
abandonar.
MUY
RECOMENDABLE.
Dirección y guión: Jonas Carpignano.
Reparto: Koudous Seihon (Ayiva), Alassane Sy (Abas), Pio Amato (Pio), Francesco Papasergio (Mommo), Naciratou Zanre (Zena), Davide Schipilliti (Rocco), Ernest Zire (Arafat), Vincenzina Siciliano (Marta), Annalisa Spirli (Annalisa).
País: Italia-Francia-Estados Unidos-Alemania-Qatar.
Año: 2015.
Género: Drama.
Duración: 107 minutos.
Clasificación: Mayores de 15 años.
Fecha de estreno en México: 15 de octubre de 2016.
MEDITERRÁNEA, LA ODISEA DE LOS REFUGIADOS (MEDITERRANEA) SE EXHIBE EN CINÉPOLIS Y EN LA CINETECA NACIONAL.
PARA INFORMACIÓN DE HORARIOS Y SALAS, CONSULTAR:
www.cinepolis.com.mx
www.cinetecanacional.net
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