sábado, 5 de mayo de 2012

FLOR DE FANGO. UNA FLOR QUE SE QUEDA EN CAPULLO.


Por: Dulce María Casasola Mendoza.

Augusto Talanquer, (Odiseo Bichir) un reconocido investigador bioquímico, abandona a su mujer, su trabajo y la comodidad de su vida para ir tras la pista de Marlene (Claudia Zepeda), una adolescente de 14 años, poseedora de una extraordinaria belleza, que irrumpirá en su vida de manera inesperada. Un día, Marlene es arrebatada de la custodia de Augusto por Genaro, un marinero sicótico y procaz, quien la seduce, y finalmente la secuestra llevándosela al ominoso puerto de Tampico, a donde Augusto la buscará para tratar de liberarla, no sin antes ofrendar su vida al dolor y a la expiación, sufriendo una profunda transformación personal.

Flor de Fango es la Ópera prima del director Guillermo González Montes, quien presenta una película con un tema fuerte y sensible como es la trata de blancas; sin embargo, la pasión que surge en Augusto Talanquer hacia Marlene, indudablemente nos hace remitirnos al filme de Lolita.

Contrariamente a lo que algunos pudieran pensar, Flor de Fango no es una cinta de protesta, denuncia ni crítica social, fundamentalmente es una historia que habla sobre las pasiones humanas y  la búsqueda del amor y lo que empieza como una historia de amor se va convirtiendo en un thriller que se va alejando de la premisa inicial, lo que provoca que la historia pierda fuerza y no llegue al fondo de ninguno de los dos temas, más bien parece que son dos historias que tratan de enlazarse en algún punto.

Ni las estupendas actuaciones de Odiseo Bichir ni de Claudia Zepeda logran levantar una película  que parece divagar entre dos temas y no profundiza en ninguno.

Dirección: Guillermo González Montes
Reparto: Odiseo Bichir, Claudia Zepeda, Claudia Ramírez
País: México
Año: 2011
Género: Drama
Duración: 110 minutos
Fecha de estreno en México: 4 de mayo de 2012





1 comentario:

Mirna dijo...

La verdad que me parecio genial la reseña, y las fotos de la escena en el apartamento tambien muy buenas, no puedo esperar a verla