Por: Angélica del Carmen Rodríguez Martínez
“Guten Tag Ramón”, nos cuenta la insólita historia
de Ramón (Kristyan Ferrer), un joven
adolescente que vive en el norte de México, y que se rehúsa por todos los
medios a engrosar las filas del narcotráfico… casi el único empleo en su tierra
natal. Ramón intenta una y cinco veces cruzar la frontera con Estados Unidos, y
una y cinco veces regresa derrotado; todo 
indica que Ramón en el fondo no
quiere cruzar al otro lado, al menos eso le sentencia su abuela (Adriana
Barraza), pero lo que sí está dispuesto a hacer Ramón, es viajar a Alemania, por la sencilla razón de que un
amigo del pueblo le cuenta que tiene una tía que vive por esos rumbos, que gana
muy bien, y que le dará trabajo sin
problema alguno. Ramón sin más se va a Alemania. Pero nunca 
encuentra a la
famosa tía, y comienza su peregrinar por
las calles de la ciudad, es así como
conoce a Ruth (Ingeborg Schoener), una enfermera jubilada, que encuentra en la
fragilidad de Ramón y en la soledad de ella, la maravillosa posibilidad de
romper con las barreras del lenguaje y de los prejuicios e iniciar así, una
hermosa amistad.
indica que Ramón en el fondo no
quiere cruzar al otro lado, al menos eso le sentencia su abuela (Adriana
Barraza), pero lo que sí está dispuesto a hacer Ramón, es viajar a Alemania, por la sencilla razón de que un
amigo del pueblo le cuenta que tiene una tía que vive por esos rumbos, que gana
muy bien, y que le dará trabajo sin
problema alguno. Ramón sin más se va a Alemania. Pero nunca encuentra a la
famosa tía, y comienza su peregrinar por
las calles de la ciudad, es así como
conoce a Ruth (Ingeborg Schoener), una enfermera jubilada, que encuentra en la
fragilidad de Ramón y en la soledad de ella, la maravillosa posibilidad de
romper con las barreras del lenguaje y de los prejuicios e iniciar así, una
hermosa amistad.
“Guten tag Ramón”, que en español significa “Buen día
Ramón” -coproducción germano-mexicana, 2013-, es una película que rompe con el
tema de la violencia, y se divorcia del cine que lo masacra todo, y del cual
están inundadas las carteleras actuales. Y a pesar de que, es una comedia
refrescante, que aborda temáticas muy recurrentes en México, que aquejan de manera cotidiana a nuestro
país, como es el problema de los jóvenes en México, que ya no pueden 
continuar
con su educación, que se ven obligados a trabajar en empleos mal pagados, a
sumarse a las filas del narcotráfico, o bien cruzar la frontera norte del país.
Si bien es cierto que “Guten tag Ramón”, nos da los buenos días con esas
reflexiones, también lo hace en la película, desde la propia mirada alemana,
que desacraliza la percepción estigmatizadora que el siglo XX les heredó, y que refleja a un país con una
población de adultos mayores, disciplinados en su trabajo, apegados a sus
rutinas, defensores de su espacio vital, que 
luchan con el fantasma del racismo
y de su pasado, que garantizan por encima de todo las reglas que tienen, que
viven tranquilos su vejez recibiendo una pensión, producto de su trabajo que
les garantiza la vida, a través del Estado...pero que no los exime de la
soledad forzosa con la que tienen que cohabitar a diario. 
El hilo conductor en
“Guten tag Ramón”, de principio a fin de la película, es el tema de la
migración, pero el giro que se plantea en el guión no es el habitual. Su mensaje
es alentador para los protagonista, es decir, no exalta la violencia cruda y depredadora que devora
las almas, y que basa en ello su éxito para contarnos una historia, por el
contrario brinda la esperanza desde la propia vivencia humana y cotidiana, que
es la de reconocer en “la 
otra” y “el otro”, lo humano que habita en mi. Y que
despierta a lo largo de la función risas cómplices, carcajadas francas, ilusiones,
anhelos, sueños compartidos y lágrimas, que como espectadores nos mueven y nos
conmueven a la solidaridad y generosidad. “Guten tag Ramón”, es el otro cine
que nos encuentra y reencuentra con las historias personales impregnadas de
actos de amor, como el que Ruth despierta en Ramón y Ramón en ella.
“Gutent tag Ramón”, es una película escrita y dirigida
por Jorge Ramírez-Suárez –“Conejo en la Luna, 2004”-, quien tiene viviendo diez
años en Alemania, y que incluye momentos de su vida, en los que llegó a
Alemania sin hablar el idioma y cómo una mujer jubilada de nombre Ruth se cruzó
en su destino y supo que ahí había una historia que contar. Y el guión, el
reparto son la muestra de tan singular historia en donde sobresale Ingeborg Schöner, actriz alemana, que se había retirado del cine pero que con
“Guten tag Ramón”, decide regresar; y Kristyan Ferrer, que desde que el
guión se estaba 
escribiendo el director sabía que era uno de sus actores
preferidos.
Director: Jorge Ramírez-Suárez
Reparto: Kristyan Ferrer, Ingeborg Schöner, Héctor Kotsifakis,
Arcelia Ramírez, Adriana Barraza
País: México Alemania
Año: 2013
Género: Drama
Duración: 120 min
Clasificación: Mayores de 13
Fecha de estreno en México: 21 de Agosto 2014
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