miércoles, 15 de enero de 2014

ENTREVISTA CON JUSTIN TIMBERLAKE




A propósito de las salida en DVD de la película APUESTA MÁXIMA (RUNNER RUNNER) tenemos una entrevista con Justin Timberlake. Que la disfrutes y está al pendiente,,, porque tendremos 5 DVD de la peli para regalarte.


Justin Timberlake es uno de nuestros favoritos en 432Magazine; canta, produce, baila, actúa y se involucra en proyectos artísticos y humanitarios. Ahora este muchacho está de nuevo en el cine por su participación en Apuesta Máxima que ahora sale a la venta en DVD y Bluray y además tiene una breve actuación en una de las cintas nominadas en la temporada de premios: Inside Llewin Davis. 


432Magazine: Hablando de Apuesta Máxima, en este punto de tu vida, ¿qué buscas que digan tus personajes acerca de quién eres tú?
JT: Hay muchas similitudes en el proceso de hacer cine y el de hacer música, siempre estás representando un papel. No creo que a fuerza quieras decir algo tuyo, quiero decir algo personal, creo que más bien encuentras cosas, eso me pasa a mí, encuentro en mi algo que es como lo que tiene el personaje para así poder aterrizarlo. Pero al final, eso es lo más divertido de hacer películas, es el hecho de que puedes transformarte en otra persona. No importa si le estás poniendo “demasiado” de ti. Con la música, no lo sé. Lo sitúo más como escritura creativa. Hay similitudes, también encuentras dentro de ti algo que sientes que se relaciona con lo que estás escribiendo. Porque necesitas hablar desde una perspectiva.  Pienso que debes crear un personaje desde una perspectiva. Para que así  actúe de una manera. Pero no lo sé, tal vez estoy haciendo películas justamente porque no podría explicarte por qué me contratan. Sé que de verdad disfruto el proceso y siempre ha sido así. Me ha gustado estar enfrente y atrás de la cámara. Involucrarme en crear lo que va a ser la cinta. Eso puede significar a veces hasta ayudar a re escribir los diálogos, o hacer sugerencias de la música original para la película, lo cual he hecho muchas veces.
Si conoces muchas personas en el medio comienzas sólo a colaborar y ellos te piden tu opinión en algunas cosas como estas. Desempeñar un personaje, es ser la parte más visible de todo aquello con lo que el público pueda identificarse. Lo menos que puedo hacer  es encontrar en mi lo que el personaje me pide e inyectárselo y después encontrarle todas las características físicas empezando de adentro hacia afuera, al menos eso es lo que yo hago. Entonces solo falta esperar que el público se identifique con el personaje de una forma u otra

432Magazine: Con esta película, ¿De alguna manera te cuestionaste sobre tus propios límites morales al interpretar a Richie?
JT: Lo más divertido de interpretar a un personaje como Richie, es que debes dejarte ir; debes vivir al límite de ti mismo. Y lo haces, quiero decir, obvio entre lo que te dicen “acción” y “corte”, en esos momentos estás en un lugar donde vas tan lejos como puedas. No piensas en las consecuencias. O sea, eso es lo asombroso de ser actor, es que no tienes consecuencias. No hay balas de verdad, es decir, no nos estamos pegando en verdad. Pero cuando se proyecta en un cine en una pantalla de 8 o 10 metros de alto, el público lo ve y lo siente como si fuera real. Y es asombroso el hecho de estar involucrado en el proceso. Pero al hacer una película como esta, creo que hay una parte donde, como dije, encontré una parte mía para poder hacer el personaje, donde pude aterrizarlo mejor. Podría hacer algunas cosas lo mismo que él. Hay cosas que encuentran una referencia en mi cabeza, para hacer que la escena funcione para mí.  En lo que respecta a sensibilidad moral, encuentro en mi vida cosas que, bueno… somos humanos ¿no? Todos en algún  momento nos hemos hecho esas preguntas sobre nuestra propia moralidad. Algunas veces hacemos lo correcto, a veces no. Pienso en ese momento cuando acabas de tomar una decisión, ese es el mundo en el que he estado viviendo mientras hacía a Richie. Creo que puedo describir a Richie como un tipo bueno que está en el mundo equivocado tratando de hacer lo correcto. Él trata todo el tiempo de permanecer dentro de lo que considera lo correcto. Pienso que es una de esas situaciones cuando en tu vida finalmente te das cuenta que te metiste en algo que podrías haber evitado. Ya sabes, ese tipo de “errores involuntarios”. Veo a Richie en ese tipo de situación.   Lo percibo como un soñador, un idealista. Creo que por la manera en la que se comporta cae en el error involuntario. Y en la segunda parte de la película trata de ver cómo salir de él. Lo mejor de la película es la forma en la que va progresando y lo oscura que se va poniendo la situación, ya que Iván, el personaje de Ben sigue encontrando las maneras para controlar a Richie, para tenerlo agarrado de las pelotas, materialmente. No dejarle ningún escape posible. Es una película en la que estos tipos están tratando, ambos, de salirse de eso, Richie quiere salirse y Black también trata de inventar una movida para hacer lo mismo. Así que “que gane el mejor”. Otra cosa que es muy buena de esta película, de hecho es una de mis cosas favoritas, es que no acaba como tú creerías que va a acabar. Te quedas con un sentimiento de “¿cómo?” te deja pensando si fue o no, un buen final para el personaje de Gemma y eso es algo que de verdad me gusta de la cinta

432Magazine: Estamos pasando por épocas duras económicamente y tú eres una persona muy exitosa. ¿Se te hace difícil confiar en las personas? Ya ves lo que les sucedió a estos personajes de la película…
JT: Bueno, sí, ya sabes… con el debido respeto a las generaciones debajo de mí… Sueno como un viejo diciendo esto…. 

432Magazine: Diríamos que suenas como alguien experimentado
JT: Tengo experiencia y la fui obteniendo desde muy chico. No quiero faltarle el respeto a las generaciones de arriba o de debajo de la mía, pero creo que son del tipo “haz esto rápido aunque no hagas bien el trabajo”. Ya hice una película sobre eso. Pero esta película no es  acerca de personas que discuten sobre cuántos billones van a perder por algo que dicen que inventaron. Yo vengo de un ambiente en el que se demuestra lo que se tiene practicándolo, así trabajas.
Ese es el trabajo más duro que las personas pueden hacer, y pienso en muchísimas personas de una misma generación, personas a las que respeto inmensamente que son de mi misma edad, como Ryan Gosling, él sabe hacer su trabajo, pero creo que también le enseñaron a hacerlo. Creo que es parte de nuestra generación, si logras algo es porque hiciste todo el trabajo, no porque alguien te lo dio. No me importa ser un matado, lo disfruto. De hecho creo que me siento bien en esa posición, pero pienso que probablemente también es porque entrené, y entrené y entrené desde muy chico para poder demostrar en la práctica que sabía hacer mi trabajo. De la misma manera en la que lo hace un atleta. Salir y mostrar el trabajo ejecutándolo bien, solo para regresar a seguir estudiando.
Ver a tus actores favoritos si querías ser actor, escuchar a tus cantantes preferidos si querías ser cantante. Aprender la manera en la que los autores escribían las canciones, por eso creo que las crisis económicas debieran darte ánimo, no creo que la crisis sea la culpa de una generación por sí misma, creo que siempre hay circunstancias atenuantes de los fenómenos.
De eso hablamos en esta película, de alguna forma esta cinta es parte del  clima cultural e intelectual de esta generación, porque es el nuevo sueño americano. Vamos a ver, cuál era el sueño americano; ¿ser rico y famoso? ¿De verdad era eso? No, lo original fue ser rico y después fue, ser rico y famoso, y lo de hoy es ser: rico y famoso… y serlo muy rápido. Pienso, por ejemplo, en la accesibilidad de todo lo que tenemos. Poder, con solo presionar un botón, tener unos pantalones enviados a tu casa. Yo no crecí con eso. Es algo sorprendente y estas cosas maravillosas están al alcance de la mano de todos, pero creo que también fomentan un tipo de comportamiento que se da entre lo que lo haces y el tiempo en que toma realizarse la operación completa, en el surge una clase de espacio “en blanco y negro” en nuestra situación económica. Donde se muestra lo real.
No quiero decir que  “a todas vistas” sea malo, pero hay esta denominación de los muy ricos y los muy pobres que está surgiendo. Bueno, obvio no es algo nuevo, pero ha sucedido en nuestra cultura económica. Creo que cuando pones estas dos cosas juntas y la gente ve una oportunidad, va a hacer lo que sea para sobrevivir y eso también es parte del clima que marca nuestra época, que es de lo que habla esta película

432Magazine: Hubo una época donde medíamos a la gente por su riqueza material. Ten tu casa propia, ten un Cadillac a la puerta, logra el sueño americano. ¿Es diferente ahora?
JT: Las personas ya no quieren un Cadillac. La gente quiere inventar su propia versión del Cadillac. Quieren tener un Cadillac pero no quieren que sea un Cadillac, quieren que sea cualquier cosa que se les ocurra. Quieren ser diferentes.

432Magazine: ¿Crees que el sueño Americano se ha convertido en algo más difícil de lograr porque ahora involucra el que se pulse un botón?
JT: Yo diría que tiene sus pros y sus contras. Creo que estamos creando una generación de seres más listos, creo que hay muchísimas cosas que un niño de cuatro años con un Ipad en las manos puede aprender mucho más rápido. Pienso eso, pero no creo que signifique que no deban aprender a escribir en letra cursiva en algún momento de sus vidas. Sólo es una opinión.
Creo que se puede encontrar el balance entre todo eso, espero que sea algo por lo que todos nos esforcemos, porque siento que es parte de lo que está pasando.  No podría decirte que hay de malo o bueno en ello. No quiero referirme a la generación venidera de una forma negativa, son como son. Sabes, de alguna manera siento algo de envidia.   Pero también estoy orgulloso de ser como soy, de lo que me tocó vivir. Se perfecto en qué puedo confiar y que lo que hago es porque tengo cumplidas mis “10,000 horas de vuelo”…  esto suena como lo que dice Malcolm Gladwell en su libro… es  THE OUTLIERS?  Sí THE OUTLIERS, yeah. 

432Magazine: Gordon Gecko, el personaje antagónico de las películas de Wall Street, vendría a ser el epitome de lo que sería el Hombre del siglo XX. En esta cinta Ben está haciendo una variación de este estereotipo ¿no crees?

JT: Estoy de acuerdo, hay una clase de ese genio de Gecko en su personaje.

432Magazine: ¿Por qué crees que ese tipo de historias nos emociona? El público ama a esos personajes y siguen existiendo por una razón. 
JT: Creo que es por la misma razón por la que de alguna manera se ama a Al Capone. Nos caen bien porque nos gusta ver que pueden luchar contra el sistema.  Creo que puedes darle a alguien un sistema social, de reglas, de modos establecidos y te pueden decir, muy bien, eso es lo que haré. Hay un A, B, C…  eso es lo que todo el mundo hace y de repente tienes a un tipo que dice “Bueno, ahora ya hare algo más, haré D”  Voy a crear mis propias reglas por mí mismo. Y creo que yo junto con otros, especialmente mientras crecíamos, idolatrábamos esa actitud, el hecho de que alguien que pudiera crear su propio mundo lo hiciera. Honestamente lo que estamos diciendo se relaciona con la generación tras de mí. Creo que funciona siempre, ya sabes, la capacidad de crear algo propio. No creo que el hombre moderno piense en reinventar la rueda, sino que creo que piensa en reinventar el auto completo, incluidas las cuatro ruedas.

432Magazine: ¿Crees que sea importante que se mantenga el tener una división entre los que tienen y los que no?
JT: Soy el hombre equivocado para hacerle esa pregunta. Estoy muy feliz con lo que tengo, estoy feliz de estar vivo, soy un hombre feliz de vivir donde sea si significa seguir haciendo lo que me encanta hacer, no sé si es un poco como dice el dicho: “Mucho de “lo que sea” es malo” –bueno o malo.
Es también como el camino al infierno, que dicen que está lleno de buenas intenciones.  Creo que es bueno estar aquí sentado mientras hablamos de Richie porque el camino a su infierno está lleno de buenas intenciones, pero lo que Brian y David, los escritores, han hecho tan bien  y en lo que en verdad está consciente Brad (Furman el director)  y Ben con su personaje de Iván, es que eso cuestiona su propia moralidad. Hay partes, hay escenas en la película donde puedes ver la vulnerabilidad, desde el sentido en el que él sabe dónde está parado, solo que tal vez ha llegado demasiado lejos. Y Richie, aunque es un tipo listo, es un idealista, de modo tal que resulta en lo que hablamos hace rato, de que caen en un “error  involuntario” y ahí está el punto… puedes aprender de eso, pero no puedes deshacer lo que sucedió.
Para mí, si estos dos personajes estuvieran en otras circunstancias, hubieran sido los mejores amigos, casi hermanos. Esto es algo muy interesante que tanto Ben como yo descubrimos al hacer estos personajes; que en otras circunstancias ambos serían hermanos de sangre, pero esto fue lo que les toco vivir y esta es su realidad.  

432Magazine: En el ir progresando en tu carrera artística, ¿tomas más riesgos o piensas muy bien cada posibilidad antes de hacer cualquier movimiento?
JT: Te diría que hago de las dos formas. Pero en el orden opuesto. Soy muy analítico y realmente no podría decir que usualmente soy un “apostador”.  Pero creo que en algún momento, algunas ocasiones, debes hacer cosas fuera de lo común, a veces solo por hacer sentir incómoda a la gente. Incluyéndote a ti mismo. Debes ponerte en situaciones donde te sientas un poco “no tan cómodo”  porque de esa manera te paras y haces algo que nunca habías hecho antes y eso es algo a lo que yo estoy dispuesto. Casi siempre.
 


 


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