La exposición se inauguró este 5 de Marzo y
permanecerá abierta hasta el 17 de Junio en el Museo Nacional de Arte.
Una interesante y muy bien seleccionada muestra de
un tema del arte que ha permanecido un poco a la saga con respecto al desnudo
femenino y que en esta exposición a través de 171 piezas podremos observar.
La muestra es una precisa y bien orquestada
selección de un tema por demás presente desde la más remota antigüedad en el
arte: El desnudo masculino.
La curaduría estuvo a cargo de los especialistas
Guy Cogeval, Ophélie Ferlier, Xavier Rey, Agustín Arteaga y Adolfo Mantilla y
loque llama la atención es que el recorrido es lúdico, sin seguir reglas de épocas, tendencias,
escuelas o técnicas; integrando de manera sobria la exhibición del cuerpo
masculino transmutado en diversos ambientes y materiales, desde la pintura más
académica hasta las manifestaciones escultóricas, pasando por la foto o el
dibujo, el grabado o la instalación.
Aunque la exposición es el trabajo en equipo del
Museo d’ Orsay y el MUNAL en el que varias piezas provienen de Europa, también
es cierto que se le da un lugar importantísimo a artistas nacionales.
Si bien el desnudo masculino había sido menos recurrente en el arte a partir del 1800,
contrapuesto al desnudo femenino, es
innegable la importancia del desnudo
masculino durante el siglo XIX y sus profundas raíces dentro del clasicismo del
siglo XVIII. Lo interesante es como, aunque de una manera subrepticia,
dentro del contexto de la plástica llega a nuestros días.
Es también cierto que de unos años para acá el estudio del desnudo del hombre ha ido cobrando fuerza y hoy por hoy no solo ha invadido los campos del arte sino también de otras formas de comunicación, como lo es la exposición publicitaria, y a partir de esto se ha impuesto una redefinición de las percepciones de cómo se ve o debe verse en todos los sentidos el cuerpo y en este contexto las fronteras entre lo permisivo y lo represivo se mezclan continuamente. De ello han devenido conceptualizaciones y paradigmas encuadrados dentro de campos artísticos, antropológicos y sociológicos tocando áreas como la sexualidad, la mercadotecnia y la filosofía social.
Es también cierto que de unos años para acá el estudio del desnudo del hombre ha ido cobrando fuerza y hoy por hoy no solo ha invadido los campos del arte sino también de otras formas de comunicación, como lo es la exposición publicitaria, y a partir de esto se ha impuesto una redefinición de las percepciones de cómo se ve o debe verse en todos los sentidos el cuerpo y en este contexto las fronteras entre lo permisivo y lo represivo se mezclan continuamente. De ello han devenido conceptualizaciones y paradigmas encuadrados dentro de campos artísticos, antropológicos y sociológicos tocando áreas como la sexualidad, la mercadotecnia y la filosofía social.
De esta forma, el desnudo del hombre o el hombre al
desnudo ha sido motivo de numerosas exposiciones efectuadas en diversas
ciudades como Viena, Budapest, París y ahora la Ciudad de México.
La propuesta de la exposición es ese intento
de hacer una innovación, una renovación sobre un tema conocido y del que el
espectador tal vez habrá contemplado alguna de sus obras ya se a en directo
o en libros, pero que ahora inmerso en este clima de re-visión suscita nuevas lecturas y dinamiza la apertura que se ha dado ya hacia el cuerpo del varón.
Desde luego el Museo Nacional de Arte, bajo la batuta
de Agustín Arteaga es la punta de lanza y la forma por demás idónea para que
aprovechando el tema se presenten en esta exposición más de un centenar de piezas de
artistas nacionales cuyas obras pertenecen a acervos del Instituto Nacional de
Bellas Artes y que de una manera muy precisa muestran la concepción del cuerpo masculino dentro del imaginario de nuestro país, colocándolo, como señala el
mismo Arteaga, en una reubicación en el contexto de la reflexión estética y
existencial.
De esta manera los maestros mexicanos como Vilar, Sojo,
Vázquez, Herrán y Marín conviven con Gericault, Moreau, Bellanger, Bouguereau,
Rodin, Pierre &Gilles, Sorolla, y muchos más.
Además la exhibición se acompaña por una
publicación bilingüe con las imágenes de las piezas y textos de los curadores.
Colateralmente y en el marco de la muestra, el
Museo Nacional de Arte innovará su oferta artística dándole cabida a un vasto
programa académico donde se pueden encontrar desde conferencias, talleres,
ciclos de cine y visitas guiadas dirigidas a públicos específicos.
Las pláticas en torno al tema de la exposición se
llevarán a cabo los jueves de Marzo a Junio a las 17:00 hrs. en el auditorio
Adolfo Best Maugard, con entrada gratuita y se ofrece constancia de participación
a quienes asistan todo el ciclo.
Cupo máximo 82 personas
En cuanto al ciclo de cine se presentarán durante
Abril : Teorema, de Pasolini; El Piano
de Jane Campion, Boogie Nights de P.T. Anderson, La Ley del Deseo de Almodovar y
American Gigoló de Schrader
No hay comentarios:
Publicar un comentario