LADRONA DE IDENTIDADES (IDENTITY THIEF)

Por Fabián Quezada León 

Sandy Bigelow Patterson (Bateman) es un hombre normal, con una hermosa familia y un trabajo en el que tiene que soportar un jefe cretino. Su vida es común y corriente hasta que recibe una “bondadosa” llamada alertándolo que alguien quiso usurpar su identidad y le piden ciertos datos para “blindarlo”.  Como cualquier inocente, Sandy corrobora todas las preguntas que le hacen del otro lado de la línea, sin saber que está firmando su sentencia de muerte. Del otro lado, una astuta mujer llamada Diana acaba de obtener todo lo necesario para clonar todas sus tarjetas y hacer gastos exóticos en el otro lado del país.
Los compañeros de Sandy, hartos de su tiránico jefe deciden fundar su propia agencia y llevarse con ellos a Sandy, pero las jugarretas de Diana lo afectarán colosalmente a Sandy aunque ellos estén a miles de kilómetros de distancia. Sus deudas en las tarjetas se elevan a los cielos sin que él lo sepa... y le cancelan sus tarjetas, ¡para él todo es un sinsentido!  
Obvio, trata de arreglar el hecho de la clonación; pero seamos honestos, ¿alguna vez has tratado de arreglar esta clase de asuntos con tu banco?? Es un infierno viviente, aquí y en China. 

Para su desgracia Sandy trabaja manejando dinero, precisamente fondos de inversión. 
Con la policía tras él acusándolo de fraude, sus nuevos jefes desconfiando y un bebé en camino, Sandy decide que él mismo atrapará a la impostora… solo que no tiene idea de a quién se está enfrentando. 
Deja Colorado para volar hasta Miami y capturarla,  es el comienzo de un viaje que lo traerá de regreso a casa atravesando Estados Unidos en auto,  plagado de innumerable contratiempos y sorpresas.

Evidentemente el caso de robos de identidad y de clonaciones no tiene ni remotamente nada de cómico; no solo por los líos legales que se desprenden de ello, sino por los trámites subnormales y la pérdida infinita de tiempo que los bancos ponen a hacer a los cuentahabientes para “revisar” su caso.

Aunque el tono de la cinta es de comedia ruda lo cierto es que nos queda una enseñanza real: Jamás des tus datos por teléfono. Eso hay que repetírnoslo hasta el cansancio.

Jason Bateman y Melissa McCarthy han hecho muchas películas de comedia y han salido más o menos airosos del hecho. De hecho McCarthy se catapultó a la fama tras “Bridesmaids”. 
De estos antecedentes  nos queda claro que Bateman y Mac Carthy  pueden enfrentar el difícil arte de hacer reír, con una base de credibilidad. Melissa tiene una cinta para protagonizarla y crea una versión de Diana en la que en una licuadora a alta velocidad pone un papagayo, una camisa hawaiana y toda la línea de maquillaje tipo “Pañales y Tiaras” junto con una botella completa de tinte rojo leprechaun. 
Sí, Diana es un poco Flashy  lo cual está bien. Pero no es suficiente para salvar el contenido de una cinta.

Y entonces, cuando el roadmovie de desventuras tipo “Después de hora” (Martin Scorsese 1985) reloaded, debe  “jalar” elementos de la comedia pastelazo para poder sostenerse; no importa, Melissa se hace cargo con una entereza de peso completo. Mientras Bateman trata de odiarla por colocarlo en esa situación y todos sabemos que, como es Hollywood  y como é les un buen hombre, ese odio no progresará. Para darle más dinamismo se contempla la idea de que Diana ha hecho sus “gracias” con alguien equivocado del que jamás sabemos ni quién es, ni de donde o por qué manda a los feroces Rodriguez y T.I. a acabar con la pobre Diana. 
Disparos más, disparos menos los “perseguidores cobra recompensas” son puestos fuera de combate de una manera absurda porque es obvio que jamás debieron estar en ese guión.

Al final de cuentas no nos sirven de nada, cuando la estructura del guión se precipita hacia la “ternurita” de considerar fiable y digna de amistad a una criminal. Perdón, no se cuántos estarían dispuestos a hacer migas, o equipo criminal, con quien haya clonado su tarjeta. ¿Dónde está lo que se supone que debe ser la enseñanza moral: NO harás fraudes? No existe. Se fue, caput, terminado, porque se le justifica con una carga absolutamente falsa de “comprensión” y una conversión moral más falsa que las chapitas en el maquillaje de Diana.

Sin duda cualquiera que haya pasado por una situación similar podría haber dado muchos más finales a esta historia, que pese a los esfuerzos y simpatía de sus protagonistas, se hunde en la bancarrota resolutiva. ¿Por qué no sacar ese pequeño demonio de la revancha  y acabar con algo un poco más realista y tal vez deliciosamente violento? ¿O trágico?, o simplemente sarcástico… La mayoría sin duda sería más asertiva que el cataclismo final donde el crimen se transforma en una almibarada torta de cumpleaños.

Director: Seth Gordon

Reparto: Jason Bateman, Melissa McCarthy, Jon Favreau, Amanda Peet,

País: Estados Unidos

Año: 2013

Género: Comedia

Duración: 1 hr. 51 min.

Clasificación: Mayores de 18 Contenido sexual

Fecha de estreno en México 3 de Mayo