Con
Jonas ya fuera de peligro, recuperándose y además con lo que les ha revelado a
la tripulación del Magus, nuestro equipo de aventureros siguen su viaje en búsqueda
de Emmet.
Desde
luego, que nuevos retrasos y trampas se les presentarán en el camino. Por ahora
una terrible niebla los ha hecho navegar a ciegas a lo largo de la Boiuna,
buscando sólo no perder la orilla de vista.
Este
esfuerzo los lleva a pasar horas en cubierta y durante ese tiempo, Jonas y Lena
vuelven a “reconocerse”. Sí, Lena está de acuerdo en que deben continuar la
búsqueda pero… todos apuestan por Emmet … ¿y su padre? ¿Acaso no importa lo que
le pase a él? Jonas está de acuerdo con ella y a ambos los unen los recuerdos
por Russ
La
niebla sige siendo muy espesa pero, aún así los exploradores pueden identificar
que una silueta se acerca cada vez más hacia ellos, puede ser… pero es casi
imposible… ¡sí!… se trata de un barco… pero… ¿quiénes son ellos?
Tess
trata de avisarles que vienen en curso de colisión, pero no tiene respuesta del
otro barco. Un poco apurada hace sonar la sirena, como el otro barco sigue su
trayectoria sin moverse Tess se ve obligada a ordenar que apaguen los motores
del Magus
Pensando
rápidamente, Lincoln toma unas bengalas y las enciende; pero el barco no
responde, sigue su trayectoria sin inmutarse.
Cuando
casi colisionan, Lincoln nota que la Boiuna esta hirviendo; grandes borbotones de
calor y vapor los rodean… el barco sigue hacia ellos… la tripulación se prepara
para la colisión, Tess redirige el rumbo para evitar daños mayores, pero aún así
tienen un golpe que los sacude enviándolos contra una roca.
Obviamente
como era de esperarse, desde el cuarto de máquinas vienen noticias de lo que
Emilio y Jahel han encontrado de desperfectos. El barco ha sido dañado y no
podrá seguir, ni aunque lograran arreglar, usando lo que fuera, el desperfecto. El Magus está fuera de servicio de manera idefinida.
Así
pasan dos días sin que logren comunicarse con ningún punto para pedir ayuda…
Han mandado sin cesar el mensaje de emergencia: Mayday, Mayday, Mayday... lo único
que responde es el sonido de la interferencia y el silencio
Como
la espera se hace insoportable, deciden que deben hacer algo. Lincoln en
especial, está decidido a internarse hacia la última localización de su padre,
las cataratas Sahte.
Kurt lo previene, están a una considerable distancia mas o
menos a un mes de camino a pie (¡nada más!) sus posibilidades de sobrevivir son
nulas.
En
lo que están discutiendo, providencialmente (¿)
un bote parece haber escuchado el llamado de emergencia de Tess. Se acerca un barco, "el Exodus" con
cuatro hombres dispuestos a ayudarlos.
En
efecto, proporcionan a Emilio y Jahel la refacción que necesitaban. Pero
lógicamente, Kurt que es un sabueso, previene a los exploradores de que no deben
confiar abiertamente en estos desconocidos... pero nadie lo toma en cuenta, para
el resto de la tripulación, esos hombres son simplemente personas altruistas
que tratan de evitar la tala ilegal.
Los
tripulantes del Magus van más allá, no sólo son amigables con los miembros del
Exodus, sino que los invitan a cenar y tomarse unos tragos. Kurt no puede
confiar así como así y cuando el capitán pide permiso para ir al baño, Kurt se
va corriendo al cuarto de edición, donde están todos los monitores y desde
donde puede seguir cada uno de los movimientos del capitán
Es
lógico pensar que las sospechas de Kurt tienen un fundamento y este se verá
reforzado cuando escuchemos una “conversación”
del capitán, que hará dudar a Kurt, y a nosotros, de quienes son
realmente estos hombres.
Desde
cubierta Jonas y Lena logran ver a alguien a bordo del Exodus pero… ¿cómo es
eso posible? Eran cuatro tripulantes y los cuatro están a bordo del Magus…
Por
supuesto no se van a quedar con la duda , así que abordan el Exodus… el barco
es viejo y está en muy malas condiciones… es más, no tiene ni siquiera un
radio… entonces…. ¿Cómo fue que escucharon el mensaje de Tess pidiendo auxilio?
Kurt
pide hablar con el capitán y lo lleva hacia su camarote. No bien han cerrado la
puerta, Kurt se vuelve hacia el capitán y tomándolo del cuello lo avienta hacia
la pared, ordenándole que abandone el Magus de inmediato junto con sus hombres.
El
capitán no accede y Kurt, que tiene la mechita muy corta y no se anda con
rodeos, no tiene más que darle un tiro
en el pecho. (Oh…oh…) no hay sangre, no hay ni siquiera, herida.
Cuando
Kurt se acerca a cerciorarse de que el hombre está muerto, de repente el capitán, con un movimiento limpio
lanza a Kurt por los aires al otro lado del cuarto.
En
el Exodus Lena escucha un martilleo que viene de un cuarto cerrado. Ella y
Jonas bajan a investigar, en la oscuridad está un hombre… al acercarse, Lena
descubre que no sólo es un hombre, ¡es su padre!! ¡Russ!!!
Ante
el terrible asombro, no se percata de que Kurta acaba de entrar al cuarto, y
que en un segundo la puerta se cierra tras él; dejando a Kurt, Lena y Jonas
encerrados
Lena,
entre la emoción y la sorpresa de haber encontrado a su padre, no había notado
los grilletes que Ross tenía. Al pedirle una explicación, Ross les cuenta que
existe la leyenda del Exodus , una especie de barco fantasma cuya tripulación
vaga entre dos planos de existencia, son fantasmas que van navegando por la
Boiuna en busca de cuerpos de los cuales apoderarse, si prosigues a bordo del
Exodus cuando el sol salga, la posesión se lleva a cabo y te transformas en un
fantasma que intercambia su lugar y se
queda con tu cuerpo. Para él la maldición se termina y comienza la tuya. Por
ahora, como ya hay tres de ellos a bordo del Exodus, los fantasmas solo
necesitarán un cuerpo más…
Indiferentes
a todo esto, a bordo del Magus, Tess se hace amiga con uno de los tripulantes
del Exodus que le promete un mapa muy exacto de la Boiuna… si va al Exodus por él.
Claro que ella cae en la trampa, es hecha prisionera por los otros tripulantes. Han reunido la cuota suficiente para poder apoderarse de sus cuerpos… ahora
unicamente hace falta esperar el amanecer que está a solo una hora de ocurrir…
Encerrada
junto con los demás, Tess se topa frente a frente con el mejor amigo de su
marido, Russ. Desesperada le pide que le cuente algo acerca de Emmet, pero Russ
le dice que cree que Emmet ya ni siquiera sabe quién es él mismo.
Se
había obsesionado con la magia y estaba seguro que toda venía de una sola
“fuente” La última vez que vio a Emmet fue cuando entraron en la zona de Sathe
y Emmet estaba absolutamente convencido de que ahí encontraría lo que andaba
buscando.
Al
percatarse de que sus compañeros han desaparecido, Lincoln comienza a
buscarlos. Clark y AJ están borrachos así que no sirven de mucho; pero le dicen
que al parecer, todos se fueron de visita al otro bote… Al caminar por la
cubierta, Lincoln alcanza a ver como el Exodus se marcha llevándose a sus
amigos y a su madre.
Como el Magus aún no funciona, Lincoln y Clark deben tomar
los Zodiacs para perseguir al Exodus. Con el aviso de que el amanecer no tarda
en producirse, los segundos cuentan para que los exploradores sigan con vida y
no sean víctimas de la maldición…
Mientras
tanto en el Exodus, Kurt trata de abrir
la puerta a patadas. Jonas está tratando de hacer todo lo que puede usando su
cámara, y consigue mandar una llamada de auxilio al centro de control de
edición del Magus… Jahel casi la pierde, pero logra escucharla a tiempo para
mandar las coordenadas a Lincoln, que va tras ellos en los Zodiacs; sólo les
quedan cinco minutos antes de que amanezca y aún están a un kilómetro de
distancia del Exodus.
Lincoln
y Clark logran alcanzar al barco faltando
solo tres minutos para que se cumpla la maldición. Kurt, lleno de sangre, por
fin ha logrado abrir la puerta. Kurt, Jonas, Lena y Ross logran llegar a cubierta
justo cuando Lincoln y Clark los alcanzan
Desde
luego, como ya lo vimos, las balas no sirven de nada contra estos fantasmas, así
que dispararles es inútil. Pero Kurt ha descubierto que sin embargo sí son
susceptibles al fuego, de esta manera, ¡el fuego puede salvarlos!!! Sin tiempo
que perder, Lincoln prende una bengala y quema a uno de ellos. Ahora que saben cómo vencerlos, Kurt le
prende fuego al barco y los fantasmas se quedan atrapados ahí.
Lena
intenta desesperadamente salvar a su padre, pero es imposible, ya que él se
ha transformado en uno de ellos, y no puede abandonar el barco. Lena aún así
trata de salvarlo pero Lincoln la hace recapacitar y la obliga a abandonar el
barco.
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