viernes, 14 de noviembre de 2014

ABIERTO MEXICANO DE DISEÑO: EXPOSICIÓN DE ARTESANOS DE MATA ORTIZ





En el marco del Abierto Mexicano de Diseño se realiza la exposición de los artesanos de Mata Ortiz, Chihuahua, en la Sala de Exposición del Asilo de Concepción Beistegui, ubicado en la calle de Regina No. 7, Centro Histórico, del 12 al 16 de Noviembre, en un horario de 11:00 a 19:00 horas.

Mata Ortiz, pueblo ubicado al norte en el Estado de Chihuahua con alrededor de 1,200 habitantes, es un ejemplo de diversos procesos articulándose de manera eficiente. Por un lado el propio proceso de diseño en cerámica; que desde su origen ha mostrado una dinámica de creciente precisión y búsqueda de mejoramiento en materiales, instrumentos y estilización de objetos. Por otro lado, el proceso de aprendizaje colectivo que ha implicado pasar del iniciador de esta artesanía, el señor Juan Quezada Celado, hasta la casi totalidad de los habitantes del pueblo, después de haber cubierto el entrenamiento de toda la familia.

El señor Juan Quezada, alfarero mexicano nacido en Santa Bárbara Tutuaca, Chihuahua en 1940, pionero en la fabricación de cerámica inspirada en la cultura prehispánica de Paquimé o Casas Grandes de Oasisamérica. Ha compartido sus conocimientos con la pequeña comunidad agrícola del pueblo de Mata Ortiz, transformándolo en un centro de producción artesanal, logrando que la cerámica que se fabrica en este pueblo se reconozca a nivel internacional.

Algunos de los premios y distinciones a los que se ha hecho merecedor el trabajo del señor Quezada son:
·         Premio Nacional de Ciencias y Artes en el área de Artes y Tradiciones Populares otorgado por la Secretaría de Educación Pública en el año de 1999.
·         Galardón Pantaleón Panduro en reconocimiento a su trayectoria como alfarero, otorgado por el Ayuntamiento de Tlaquepaque, Jalisco en el año 2000.
·         Reconocimiento como Chihuahuense Distinguido por el Gobierno del Estado de Chihuahua en el año 2014.
Los comienzos del señor Quezada como alfarero se remontan a su infancia, cuando a la edad de 14 años, yendo a las montañas a recoger leña, encontró en una cueva cerámicas originales de la cultura Paquimé que a partir de entonces fue coleccionando. Examinó los detalles de las piezas encontradas y se dio a la tarea de reproducirlas sin tener conocimientos previos de alfarería. Después de haber realizado varios ensayos a base de prueba y error, logro realizar sus piezas.

Actualmente, en la técnica para la fabricación de estas piezas se emplean minerales como el manganeso, oxido de cobre y barro negro que otorga la dureza a la cerámica. No se utiliza un torno, sino un molde y las piezas se pulen con una piedra. Los dibujos se hacen directamente sobre la pieza, sin bosquejos previos, lo que da como resultado piezas únicas.


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