Inercia, historia que cierra cuentas
pendientes y exorciza el pasado
Esta cinta
mexicana compite por el Premio Mezcal del 28º Festival Internacional de Cine en
Guadalajara.
Como parte del programa Ópera Prima de Ficción que
mantiene el Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC) desde hace varios años,
el proyecto que resultó ganador en 2011 fue Inercia, filme dirigido por Isabel
Muñoz Coto que estrenó mundialmente en el 28º Festival internacional de Cine en
Guadalajara (FICG28), donde compite por el Premio Mezcal.
Inercia cuenta la historia de Lucía (Maricela Peñalosa) y
Felipe (Flavio Medina) quienes se reencuentran después de algún tiempo. La
expectativa de reavivar la relación que alguna vez tuvieron, así como de cerrar
cuentas pendientes, permite que inicien un nuevo romance dentro de un hospital a
causa de la enfermedad que padece él.
La inercia es la propiedad que tienen los cuerpos de
alterar su estado de reposo por la acción de una fuerza. Esa definición hizo que
la egresada del CCC, especializada en dirección y sonido directo, planteara
junto a la guionista Claudia Sainte-Luce una analogía con la vida en la que algo
llega y altera totalmente la forma de vivirla. “Es una historia en la que uno se
puede identificar con cualquiera de los dos personajes”, dijo Muñoz
Coto.
La ganadora al Ariel en 2009 por Mejor Cortometraje
gracias al documental Su
Mercé, explicó que Inercia surgió ante esa necesidad del ser humano por exorcizar
cosas, tener transformaciones e inventar historias. “Tenemos una capacidad de
engañarnos, de querer encontrar señales y acomodar todo de la mejor forma que
nos convenga”.
Agregó que la idea era contar algo con lo que la gente
se pudiera identificar y sentir algo. “Siempre me ha intrigado todo lo que
ocurre dentro de un hospital. Es una burbuja en la que te aíslas totalmente
cuando estás internado; mis personajes están encerrados en sí mismos, algo que
ocurre con muchas personas”.
Previo al rodaje, Muñoz Coto realizó algunas mesas de
trabajo para abordar el contexto de ambos personajes, aquello que no sería visto
en pantalla.
“Fue un trabajo de antecedentes”, apuntó y agregó que
para cada intérprete creó un ‘soundtrack de vida’ debido a que la música es un
elemento que siempre está presente en cada individuo durante su existencia. “El
trabajo con los actores fue doloroso en ciertos momentos porque inevitablemente
recurres a vivencias propias”.
Otro elemento que destaca dentro del argumento es la
fotografía, realizada por Miguel Ángel García quien detalló que quiso conservar
la textura y los colores de la Ciudad de México vista a través de una ventana
del hospital.
“Fue una delicia trabajar en 35 mm, además de que
representó también mi primer largometraje, requisito para hacer la Ópera Prima
en el CCC”, dijo el fotógrafo premiado por diversos trabajos.
Si bien es cierto que dentro del cine mexicano
contemporáneo hay una tendencia a lo contemplativo, la joven directora explicó
que no es algo que quiera hacer y, por el contrario, destacó el hecho de que la
gente que paga su boleto para ir al cine debe al menos entender la película por
respeto a ellos.
Aunque para Isabel los premios representan
reconocimiento, sabe que no hay mejor ganancia como que la gente pueda ver su
película. “La idea de hacer cine no es ganar premios sino hacer cada vez más y
sea visto”, concluyó.
Inercia es una coproducción entre el CCC y el IMCINE a través
de Fondo para la Producción Cinematográfica de Calidad (Foprocine). Para conocer
más sobre esta producción mexicana pueden visitar la siguiente liga:
www.ficg.mx/28/index.php/es/premio-mezcal/755-inercia
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