Por Julia Elena Melche.
Como es una tradición, la 55 Muestra Internacional de
Cine, abre con un clásico del cine nacional: Distinto
amanecer, cinta realizada en 1943 por el talentoso cineasta, productor,
argumentista, actor y director teatral Julio Bracho. Se trata de una copia
restaurada en 35 mm, que se exhibe también para celebrar el 70° aniversario de
su realización.
El filme transcurre en una noche, cuando el obrero y
líder sindical Octavio (Pedro Armendáriz), es perseguido por los pistoleros de un gobernador corrupto.
El hombre tiene la misión de recoger unos documentos que comprometen al
político y para eludir a sus acosadores se mete a un cine, donde
encontrará casualmente a Julieta (Andrea
Palma), una antigua novia de la universidad que ahora está casada con Ignacio
(Alberto Galán), un empleado público y escritor frustrado sin
aspiraciones. Julieta decide ayudar a escapar
a Octavio y lo lleva a su casa.
Distinto amanecer tiene
como telón de fondo una Ciudad de México nocturna e inquietante, con calles
sombrías, ambientes sórdidos, viejos tranvías, edificios añosos,
corrupción y cabarets, donde los peligros y enemigos acechan a la vuelta de la
esquina, en una mezcla genérica de film noir, thriller político y
melodrama cabaretero, a los que se
incorpora el drama familiar y romántico cuando Julieta y Octavio reviven su
viejo amor de juventud.
Bracho consigue una cinta de excelente factura con un uso
inteligente de la elipsis. Se apoya en la fotografía esteticista de Gabriel
Figueroa, cuyos elegantes claroscuros remarcan los espacios de una urbe
penumbrosa. Cabe destacar que la película se filmó en locaciones reales. A su
vez, el realizador logra un retrato sólido de los personajes, aquejados por
conflictos personales y en medio de disyuntivas. Julieta arrastra la grisura,
el tedio y la frustración de su matrimonio, pero el encuentro inesperado con
Octavio, removerá las cenizas de un amor que creía haber sepultado. No obstante,
el llamado a sus compromisos familiares y a su deber como esposa será más
fuerte que su pasión revivida.
El director coloca la historia en un conflictivo contexto
social del México de los años cuarenta, donde expone la corrupción sindical, las
huelgas vendidas a empresas extranjeras, el menosprecio a la creación
intelectual, gobiernos rateros, la limitada situación económica de la clase
trabajadora, el ambiente cabaretil y una
moral estricta que impide a Julieta a huir con el hombre que ama.
Con escenas memorables, como donde Julieta y Octavio bailan enamorados al compás de una
melodía de Agustín Lara, Distinto amanecer está
catalogada en el lugar 22, dentro de las 100 mejores películas del cine
nacional, y es de las primeras cintas de los cuarentas que abordó melodramas en
los ambientes urbanos, alejándose de los estereotipos rurales tipo Allá
en el Rancho Grande (1936),
dando paso a la ciudad como su gran protagonista para reflejar las
transformaciones y realidades que en ella acontecían.
Dirección: Julio Bracho.
Guión: Xavier Villaurrutia y Julio Bracho, inspirados en
la pieza teatral La vida conyugal de Max Aub
País: México.
Año: 1943.
Reparto: Andrea Palma (Julieta), Pedro Armendáriz
(Octavio), Alberto Galán (Ignacio Elizalde), Narciso Busquets (Juanito),
Octavio Martínez (Jorge Ruiz), Enrique Uthoff (gobernador Vidal), Paco Fuentes
(Memo)
Duración: 108 minutos.
Género: Drama.
EL DIRECTOR.
Julio Bracho nació en la ciudad de Durango en 1909 y
falleció en 1978. Perteneció a una familia con fuertes dotes artísticas (la
actriz Dolores del Río y el actor Ramón Novarro fueron sus primos y la actriz
Andrea Palma y el escenógrafo Jesús Bracho, sus hermanos). Julio Bracho arribó
a la Ciudad de México a causa del estallido de la Revolución Mexicana. En el
teatro universitario encontró una veta para explotar su creatividad, entablando
amistad con figuras como Xavier Villaurrutia. De su matrimonio con la bailarina Diana Bordes nació su
primogénita, la reconocida actriz Diana Bracho y su nieto es el también actor
Julio Bracho Castillo.
Se incorporó a la naciente industria fílmica como
guionista, debutando como director en 1941 con ¡Ay, qué tiempos, señor don
Simón! (cuyos fragmentos se ven
en un televisor en Distinto amanecer). En su
filmografía destaca un cuidado sentido de la puesta en escena, herencia de su
formación teatral, y el interés por temáticas cosmopolitas, lejanas al cine
rural de la época, que involucraban temas históricos entrecruzados con los
resortes del melodrama urbano, las adaptaciones literarias, el musical o el
film noir. Entre sus cintas se encuentran: Crepúsculo (1944), La
mujer de todos (1946), Rosenda (1948) y Canasta
de cuentos mexicanos (1956) La prohibición de su película La
sombra del caudillo (1960) durante
treinta años, puso fin prematuramente a su carrera.
PARA INFORMACION DE HORARIOS: www.cinetecanacional.net
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