sábado, 15 de octubre de 2011

EL GRAN MILAGRO. POCO PRESUPUESTO, MUCHAS DEFICIENCIAS.

Por: Dulce María Casasola Mendoza.





Temas como política y religión siempre causan polémica en todos los ámbitos, y el cinematográfico no es la excepción. En el caso específico de las películas con argumentos religiosos, el espectador espera recibir un mensaje o bien, descifrar algún secreto oculto que durante siglos le ha sido ocultado a la humanidad.

Pero cuando el argumento de una película habla de la importancia de los ángeles en la vida de las personas, de la fe y de un Dios como el salvador de la humanidad, además de que la acción se desarrolla dentro de una iglesia con ángeles y demonios que van y vienen durante el desarrollo de la cinta, no se puede decir que la película no es religiosa, o al menos es lo que han argumentado tanto los productores como el director de la misma, que no es un filme religioso. Y si de entrada ellos lo niegan a pesar de todos los elementos que la conforman, entonces ¿de qué estamos hablando?....

La trama de El gran milagro gira en torno a tres personajes, quienes experimentan diferentes problemas y son guiados por sus respectivos ángeles de la guarda hacia una iglesia para que aprendan a comunicarse con Dios.
Ellos son Mónica, una mujer viuda y madre de un niño de nueve años; Don Chema, un chofer de transporte público que recibe la mala noticia de que su hijo padece una enfermedad terminal, y Doña Cata, una mujer mayor que cree que su misión en este mundo ya ha terminado. Al encontrarse los tres, sus vidas cambiarán para siempre.


Con la ayuda de los ángeles guardianes, serán testigos de la lucha entre el bien y el mal como del triunfo de la fe, una revaloración de los principios universales del ser humano.
Producida por Imágica Estudios y distribuida por Dos Corazones, es dirigida por Bruce Morris con música original de Mark McKenzie, El gran milagro es la primera película mexicana hecha con tecnología full 3D estereoscópica, que genera la experiencia de ver las imágenes en la pantalla con mayor profundidad y volumen, al mismo tiempo que lleva al espectador a vivir una sensación de estar inmerso en la película.


Sin embargo, el 3D es un recurso innecesario cuando no aporta nada o casi nada a la película y por el contrario, acentúa sus deficiencias, es este caso las de animación. Es verdad que ésta contó con un bajo presupuesto para los requerimientos de una cinta de animación, pero no se puede tomar el tema del dinero como pretexto para las evidentes fallas que se notan a lo largo de los 70 minutos que tiene de duración.

La animación luce pobre en todos los aspectos, el movimiento de los personajes es mecanizado, parecieran como humanoides, además de la falta de sincronización entre el movimiento de la boca y los diálogos. Si a estas fallas técnicas, se le suma una historia que pareciera estar tomada de los libros de catecismo, que da lecciones de moral, de la importancia de acudir a la iglesia y que además toma los momentos más solemnes de la misa católica como la comunión y el Padre Nuestro, incluyendo imágenes animadas de personajes como Jesús y la Virgen de Guadalupe, por lo que tomando en cuenta de que México es en su mayoría un país donde se practica la religión católica, seguramente será del gusto de un público amante de estos temas.

Dirección: Bruce Morris (Ópera prima)
País: México
Año: 2011
Género: Animación
Duración: 70 minutos
Clasificación: Todo público
Fecha de estreno en México: 14 de octubre de 2011.

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