TERMINA TEMPORADA DE: EL DRAGÓN DORADO. Por Perla Schwartz
La globalización del mundo, borra fronteras, uniforma y desdibuja identidades, en nexos líquidos casi evanescentes. La situación se agudiza si se escribe un texto en torno a inmigrantes ilegales en un país del primer mundo como Alemania. Todos ellos capturados en un microcosmos un tanto surrealista.
Es la pluma del dramaturgo germano Roland Schimmelpfennig en El dragón dorado, obra que tuvo temporada en el Teatro Santa Catarina, y que terminó con develación de placa, este domingo 20 de noviembre. Cabe mencionar que esta obra fue reconocida con el MIlheim Drama Prize en 2010.
El dragón dorado traducida por Ana Graham (promotora del proyecto), Stefannie Weiss y Antonio Vega. Texto donde impera la ironía y una perspectiva agridulce y hasta trágica de la vida.
El también actor Daniel Giménez Cacho, es el encargado de un montaje que apuesta por el teatro físico para acentuar el subi- baja que viven los personajes en el desarrollo de la obra. Los centrales, son de origen asiático, empleados de un restaurante de comida Thai-vietnamita que da título a la obra.
Auda Caraza y Atenea Chávez diseñaron una funcional escenografía, consistente en una barra, que lo mismo sirve, como cocina, que espacio para degustar los exóticos alimentos, que funciona como los diversos departamentos de los vecinos del inmueble que se involucran en la trama.
Cociner (a)s y meseros forman parte de una especie de aquelarre que desembocan en un desastre que se desata a partir que uno de los trabajadores tiene un dolor de muela. La pluma de Schimmelpfennig es incisiva y poética a un mismo tiempo y nos muestra un mosaico del como una insignificancia genera un gran desastre.
Un equipo sólido de actores da vida a una multiplicidad de personajes: Ana Graham y Concepción Márquez, al igual que José Sefami y Joaquín Cosío, alternaron funciones, junto con Antonio Vega, Arturo Ríos y Patricia Ortiz.
En suma, una puesta en escena posmoderna de primer nivel, que confiemos retorne a cartelera en el 2012 a otro espacio escénico.
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