Por Julia Elena Melche.
Alan White es un joven padre
viudo que vive con sus dos hijos, el pequeño Benny y una adolescente con la que
lleva una muy mala relación. Al hogar llegan varios especialistas en investigaciones
paranormales para descubrir el origen de los extraños fenómenos que ahí
ocurren, desde objetos que se desplazan solos, luces que se prenden y focos que
estallan sin razón aparente, ruidos, sonidos y sombras desconocidos y llamadas
telefónicas sin respuesta. Utilizando la tecnología más avanzada, colocan por
todas las habitaciones cámaras digitales y de luz infrarroja y detectores de movimiento. Desde que empiezan a
colocar los aparatos, se manifiestan los misteriosos fenómenos, volviéndose
cada vez más violentos.
Con un guión del libretista
Rodrigo Cortes de Sepultado, la cinta marca el debut en el largometraje del
catalán Carles Torrens, quien retoma en
buena medida la exitosa fórmula de Actividad Paranormal; la colocación
de cámaras en la casa para registrar lo que ahí ocurre. Como en esta cinta, el
suspenso y terror proviene mayormente de los sucesos que se van registrando
diariamente desde las numerosas cámaras con grandes angulares.
Visualmente, hay varias
escenas al estilo El exorcista, como el cuerpo de la jovencita levitando o
trepando en el techo de la casa. Se trata de una cinta de terror que retoma
fórmulas conocidas y trilladas. El guión
no ofrece ninguna sorpresa. Desde que el jefe de familia dice que los eventos
empezaron a ocurrir a partir de la muerte de su esposa, es evidente el origen
de los mismos.
El título
original del filme significa en latín “emerger”, ya que no solo se revelan los
fenómenos paranormales, sino que también salen a flote oscuros secretos familiares.
El realizador afirma que en Apartamento
143 “la idea es dar la
ilusión de que es una película de found
footage, pero en todo momento él tenía a su lado al director
de fotografía con la cámara al hombro. Cada pequeño movimiento está estudiado,
milimetrado, para transmitir tensión al espectador. El guión estaba muy cerrado
y, aunque por momentos parece que los actores están improvisando, ellos saben
perfectamente lo que tenían que decir”.
Las
películas de found footage o películas de montaje están asociadas al género
documental y al uso de material de archivo. Su carácter es híbrido para
combinar lo real con lo ficticio, muchas veces para dar la idea de falso documental,
como es el caso de Apartamento 143. Otra cinta de terror sobre casas embrujadas y fantasmas que
echa mano de una banda sonora contundente para incrementar el suspenso, más que
de una historia original e inteligente.
Dirección:
Carles Torrens.
Reparto: Kai Lennox, Mia
Mantegna, Michael O’Keefe, Rick González y Fionna Glascott.
País: España.
Año: 2011.
Género: Terror.
Duración: 78 minutos.
Clasificación: Adolescentes
y adultos.
Fecha de estreno en México:
4 de mayo de 2012.
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